Tras la relectura de 'El imperio final' puedo seguir diciendo que es la mejor manera de empezar con Sanderson. Una trama sencilla, interesante y bien escrita, con un sistema de magias magistralmente planteado y unos personajes bien construidos. Con todo, no me gusta que la rebelión ska termine suponiendo la instauración de un nuevo reinado (aunque el rey sea el buenazo de Elend). Supongo que es culpa de los tropos de la fantasía, o quizá de la ideología de su autor, pero no compro como final feliz la sustitución de un emperador-dios por un rey-burgués. Tampoco es que hubiesen desarrollado un programa-partido, pero qué sé yo |