Muy buena segunda parte de la saga Nacidos en la Bruma. Luego de la caída del Imperio Final, Vin y la banda se junto con algunos nobles para gobernar Luthadel. Esto crea por supuesto nuevos problemas y luchas de poder. Se suman algunos nuevos personajes como Tindwyl, una terrisana que forma parte de Sinodo. Los libros son largos, pero te mantienen entretenido durante todo el relato. Lo que me pasa cuando leo estos libros, es volver a ver quien era quien ya que hay muchos personajes, muchos metales, muchos skaa, nobles, inquisidores, violentos, aplacadores, nacidos en la bruma, etc. Descansaré un poco y tomaré impulso para seguir con esta gran saga. Deberia quemar peltre... |