El principito

Mi opinión personal: Esto no solo hace que la gente se sienta sorprendida, sino que también nos recuerda las cosas realmente importantes de la vida y cambia a nuestros niños y adultos. No solo nos lleva a través de muchos mundos y personajes, sino que también nos sumerge en una historia mágica que todos deben vivir.
Este gran clásico suele considerarse un cuento infantil, pero en realidad es una crítica directa a la edad adulta, que contiene muchas lecciones y profundos temas filosóficos, como el propósito de la vida, las prioridades, la amistad y los motivos para hacer las cosas.
Podemos encontrar algunas lecciones:
• Olvidamos la importancia de ser niños, ya no los entendemos, creemos que somos sabios. Desde la primera línea hasta la última del último capítulo, el autor enfatiza algo básico para nosotros: debemos volver a ser como niños.
• No solo los niños son como niños, sino que también pueden ver cada situación que ven ¿Son correctas las opiniones de nuestros adultos? Si vemos lo que ve el principito, ¿cómo cambiarán nuestras vidas?
• Como adultos, siempre estamos pensando en resultados, números. Cuanto tiempo vivimos, que felices somos. Eso es más valioso que los números, por eso deberíamos ser como niños, enfocándonos en la vida en lugar de medir.
• La codicia no puede permitirte ver el verdadero valor. Solo las personas que trabajan, las personas que solo consideran las cosas serias, son personas que no se dan cuenta del valor de las cosas. Es alguien que nunca sabrá qué es la puesta de sol, un momento en familia, un momento de amor, un momento que vale más que todo el dinero del mundo.
• ¿Eres como un niño y siempre quieres entender lo que sucede a tu alrededor? ¿O te conformaste con la primera respuesta? ¡Nunca estés satisfecho con la primera respuesta! ¡Nunca te rindas, aprende más! ¡Nunca dejes de aprender, nunca dejes de hacer preguntas!
• No simplifiquemos, no generalicemos. Recuerdemos que cada uno de nosotros es único. Meditemos en la motivación de cada uno. Solo así podremos ver a los demás, tal como debemos verlos, únicos en un universo irrepetible.
• Hemos olvidado lo importante de ser niños, ya no los comprendemos, y creemos que nosotros somos los que tenemos sabiduría. El autor nos enfatiza desde la primera línea de los agradecimientos hasta la última línea del último capítulo algo fundamental: Debemos volver a ser como niños. 
• No es solo ser como niños, es ver toda situación como la ven ellos ¿Nuestra perspectiva adulta es la correcta? ¿Como cambiaría nuestra vida si viéramos las cosas como el Principito las veía?
• Como adultos pensamos en resultados, en números y en medidas todo el tiempo. ¿Qué tanto vivimos? ¿Qué tanto disfrutamos los momentos? Eso es mucho más valioso que los números, y por eso deberíamos, como los niños, enfocarnos en vivir, y menos en medir.
• La avaricia no te deja ver lo que realmente tiene valor.El hombre que solo trabaja, el que solo cuenta, el que solo está pensando en cosas serias, es el hombre que no se da cuenta del valor de las estrellas, es el hombre que no se da cuenta del valor de las cosas con propósito, es el hombre que nunca sabrá lo que es un atardecer, un tiempo de familia, un tiempo de amor, un tiempo más valioso que todo el dinero del mundo.
• ¿Eres como un niño, que quiere siempre entender lo que funciona alrededor? ¿O eres como un adulto que se conforma con la primera respuesta sin ir un paso más allá? ¡Nunca te conformes con la primera respuesta!
¡Nunca te rindas por entender un poco más¡
¡Nunca dejes de aprender, nunca dejes de preguntar!
• Los adultos simplifican. No simplifiquemos, no generalicemos, recordemos que cada uno de nosotros es único, meditemos en la motivación de cada quien, y así, solo así, podremos ver a los demás como debemos verlos, como joyas únicas e irrepetibles en el universo.
• Como adultos, es tan común ser irracionales en lo que pedimos a otros, y eso no es sensato, pero lo más absurdo de todo es que es algo que hacemos todos los días, pues en todo momento pedimos mucho y damos poco.
• Una de las grandes verdades de la obra: El verdadero sabio es el que sabe juzgarse de la manera correcta. Juzgar a otros es sencillo, pero ¿eres consciente de tus defectos? ¿eres consciente de lo que tienes que mejorar? O ¿prefieres criticar y juzgar y simplemente a otros?
• La vida es demasiado corta como para tomarla con seriedad. No se trata de ser irresponsables, o ver todo como un chiste. Más bien se trata de disfrutar, de reír, de sacar de cada momento eso que hace que quieras levantarte cada día de una forma distinta.
• ¿Con qué propósito haces las cosas? Medita en ese propósito, y allí, solo allí, comenzaras realmente a vivir.
• Un verdadero trabajo en el mundo de hoy no es el que te da fama, dinero o poder. Un verdadero trabajo es el que te permite servir, y eso solo lo logras cuando sirves a los demás. ¿Eso realmente es lo que haces día a día? Si solo te enfocas en ti mismo, creo que es el momento de cambiar.
• La vida no se trata de tareas, o resultados. La vida se trata de personas, y eso significa tener verdaderas relaciones, es decir, crear vínculos, y eso es en el vocabulario del Principito y su curioso amigo el zorro, domesticar. ¡Saquemos tiempo para conocer a otros! ¡Saquemos tiempo para apoyarnos los unos a los otros!
• Crear vínculos requiere paciencia y ritos, y eso tiene un precio muy alto, pues implica tiempo, exponer tus vulnerabilidades, abrir tu corazón, y exponerte a decepciones, a dolor, y seguramente a lágrimas, pues eres responsable de ese ser que está a tu lado como como pareja, como familiar, como vecino, como aprendiz, y como amigo.
• Una de las enseñanzas más impresionantes es: "Lo que embellece es lo invisible". Sin duda alguna, nuestros sentidos nos engañan, nos hacen enfocarnos en lo que podemos ver o tocar, pero ¿es lo que vemos lo realmente importante? Claramente no. Las cosas realmente vitales en la vida son las cosas que no vemos, como una buena relación, un tiempo que no puede ser reemplazado. Lo que no ves es lo realmente valioso.
• ¿Tienes poco? Disfrútalo. ¿Tienes mucho? Disfrútalo. En lo poco que tienes, si lo ves con la perspectiva correcta hará que veas que en lo poco, hay mucho valor, una vida hermosa que tienes para disfrutarla y para gozarla.
Sonríe, disfruta, mira con el corazón, y no hay nada de malo en que crezcas, lo malo es que olvides ser como un niño.