¿Próximo destino? El amor

No quiero que te guardes nada, porque lo único que conseguirás será amargarte. Si algo te molesta, dímelo. Chíllalo si hace falta. Pégame una hostia si me la merezco. Pero no te lo guardes.

Cuando dos personas quieren entenderse encuentran la forma de hacerlo, aunque no hablen el mismo idioma.

Un momento de esos que se quedan grabados en el alma. Un pequeño instante en la vida de los que componen la felicidad.

«Ahora eres una adulta, hija, y ser adulto no es algo fácil. Habrá veces en que te sentirás perdida y confusa, habrá ocasiones en que te dejes deslumbrar por cosas que no necesitas y que descuides lo que en verdad importa, pero pase lo que pase, no pierdas de vista tu Norte».

—A veces, cuando tus sueños se hacen realidad te das cuenta de que no te hacen tan feliz como habías pensado. Entonces tienes dos opciones: seguir viviendo ese sueño por cabezonería, aunque nunca llegues a la felicidad que habías imaginado, o reconocer que no es lo que esperabas y tener el suficiente tino para volver atrás y cambiar de rumbo.

Los hombres como tú estáis enamorados de la caza, no de la mujer en si.

¿Sabes lo único que ensalzaría mi ego de verdad? Que tú me amaras lo suficiente para confiar en mí, pasara lo que pasase.

Núnca serás feliz si vives para complacer a los demás en lugar de perseguir tus propios sueños.

Los hombres Montoya están condenados a hacer el ridículo ante las mujeres que quieren conquistar.

Mientras viajaba, no tenía dudas ni pensaba en nada que no fuese en disfrutar el momento. Pero en cuanto llegaba a casa, su cabeza se convertía en un caos que la hacía replantearse todo. Era como un choque de realidad después de vivir un sueño.