El nombre del viento

¡Simplemente INCREÍBLE! Parece mentira que sea la primera novela del autor.

Las 900 páginas que más rápido me he leído en mi vida. A pesar del respeto que pueda infundir este volumen, la historia se vuelve cada vez más absorbente y amena. ¡Casi no te das cuenta de que se ha terminado! Claro que también puede tener algún que otro fragmento que canse, pero ese caso sólo lo he notado una vez.

Un excepcional comienzo para una historia que promete. Tiene aventuras, fantasía, dolor, amistad, amor... todo ello descrito con una narrativa increíble, sin la excesiva densidad de Tolkien, cuyos libros están plagados de ideas filosóficas y sociales...

El Nombre del Viento es ágil, dinámico y con una prosa bastante cuidada. Con unas descripciones muy concisas y perfectamente imaginables. El autor siempre busca la manera de describir cualquier sentimiento, comparándolo con lo más parecido. También cuenta con sencillas exposiciones científicas que muestran un interés del autor por informarse antes de escribir.

Se podrían decir un millón de cosas del gran mundo que Patrick Rothfuss ha creado, dando vida a ambientes deslumbrantes con gran calidad, con sus ciudades, sus castas, culturas, costumbres y monedas, en el que rápidamente te ves introducido, sin necesidad de esfuerzo. Cautivador desde la primera página, te envuelve en su atmósfera de principio a fin.

El trasfondo de niño huérfano y universidad de magia puede resultar muy parecido a la obra de J.K. Rowling, pero las similitudes acaban ahí, porque esta novela es una fantasía adulta que intenta apartarse de los trillados argumentos de la fantasía épica, y cuenta con un estilo propio que lo hace más accesible al público en general. Además, se trata de una fantasía muy mundana, porque no me imagino a Harry Potter echando cuentas para pagar su matrícula en Hogwarts, ni a Frodo Bolson endeudándose hasta las cejas para comprar un caballo antes de partir de viaje.

Su planteamiento mágico está basado en la lógica y no en la fe o la ciencia infusa. Aquí la magia no existe, sino que es física y ciencia, aspectos que el protagonista domina con naturalidad y lo ayudan a ir cogiendo progresivamente un carisma único y se hace respetar y querer por el lector.

El final queda muy abierto y eso ha suscitado quejas, pero muchos no sabrán que fue decisión de la editorial, y no del autor, dejarlo así; de hecho, Patrick Rothfuss había escrito mucho más antes de decidir acabar El Nombre del Viento.

Es un libro impresionante, se lo recomiendo a todo aquel que le guste las aventuras con un leve toque de fantasía.

Saludos ;)