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Es un libro de esos que te marcan inevitablemente. Nos cuenta el primer día de narración de Kvothe sobre la verdad detrás de su leyenda y es que en este mundo de Patrick Rothfuss como poco es casi un mito. Kvothe entre todos sus rodeos y desvaríos ( que tras cada página que te adentras en el libro descubres la real importancia de todas esas aportaciones) nos explica su vida y el cómo labró su fama (básicamente por su ingenio, destreza, errores y algunos golpes de suerte. Porque no siempre tiene que ser el protagonista un pobre desafortunado durante todo el libro). Rothfuss logra que sientas la misma curiosidad de Kvothe cuando aprende algo o que prácticamente seas capaz de escuchar en tu cabeza cuando toca el laúd ¡Esa sí que es magia digna de una fantasía épica de tal calibre como este libro! Además ,por si fuera poco, se nota que Kvothe se crió con un grupo de grandes artistas por su forma de contar la historia, aunque a veces parece que exagera sus victorias y el horgullo herido de su rival, prácticamente lo vives tanto que sientes lo que Rothfuss plasma. La mitad de las veces ni caes en ese detalle o lo ignoras porque ansiabas que le dieran una lección como con Ambrosio Asno. Es una narración en la que redescubres la importancia de la amistad y trabajar para alcanzar tus metas. Puede que como consecuencia de leer el libro te pases un par de semanas más cabezota de la cuenta e intentes dividir tu mente para levantar una moneda y así empezar a usar la simpatía (solo recuerda que dejan muy en claro que no uses el calor de tu sangre para hacerlo eh, y si alguien lo logra que nos avise al resto para seguir probando un rato más a ver si lo conseguimos nosotros también), en todo caso tampoco es como si nos fuésemos a tirar de un tejado como hace Kvothe unas cuantas veces. Por si no ha quedado claro: es un libro lleno de magia y verdad, aventuras y emociones, música y tragedias, triunfos y planes descabelladamente ingeniosos, todo ello concentrado en Kvothe un simple tabernero que accede a que metamos las narices en su vida descaradamente. |
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