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Me resulta terrible que tanta cantidad de temas horribles se traten de una forma tan superficial e infantil. La historia podría tener mucho potencial, pero la autora se empeña en hacernos ver que la rabia se puede transformar en pasión. He de reconocer que el crecimiento personal de Marfil desde el primer libro hasta este, me ha dejado bastante impresionada, pero aún así creo que no profundizan en sus traumas ni en como las cosas que ha vivido la convierten en otra persona. Por otro lado no creo que la relación con Sebastian sea un referente de romanticismo. Es una relación tóxica donde las haya. Ella no le conoce de nada y se cree enamorada. Cada vez que él hace algo que a ella no le gusta del todo dice que le odia y se va corriendo en lugar de enfrentar la situación como dos adultos y hablar las cosas. Él la trata como una chiquilla y admite la atracción sexual que siente hacia ella, pero ¿hay algo más? Punto a su favor que cuando ella dice para, y no son pocas veces, él para. NO es NO. Ambos libros son una lectura rápida para un momento de distracción. Me decidí a leer Enfrentados (Marfil y Ébano) porque estaban por todos lados. Las portadas me resultaban muy atractivas, y aunque la historia de la chica que se enamora del guardaespaldas está más que trillada, podía haber habido algo interesante. No sé muy bien lo que esperaba, pero sin duda era una escritura más madura y un tono más adulto. Personalmente no me puedo resistir a un grupo de hombres musculosos trabajando juntos, así que con eso me quedo. |
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