Creo que es un libro que si te lo lees con unas expectativas no muy altas y simplemente para entretenerte y distraerte un rato cumple con su cometido, sin embargo, aunque la trama sí puede llegar a enganchar, es solo gracias a Sebastian, que se mantiene como un personaje misterioso que crea curiosidad e interés por conocer por qué es como es. Por el contrario, el otro personaje principal, Marfil, provoca que te den más ganas de cerrar el libro y dejarlo sin terminar que de seguir conociéndola. Es egoísta, caprichosa y egocéntrica. Durante más de la mitad del libro se comporta como una niña y parece que le da exactamente igual que su vida corra peligro, haciendo cosas sin sentido y poniendo en peligro a otras personas, personas con la que nunca se disculpará, claro. Además, espera que todo el mundo reaccione como ella se espera y quiere y cuando alguien simplemente la pilla por sorpresa se enfada y monta un numerito. Finalmente, la otra razón por la que solo le he puesto 2 estrellas es por que aunque es verdad que la abundancia de diálogos ayuda a que la lectura sea más dinámica y fluida, las excesivas y muy minuciosas descripciones de detalles sin importancia para la trama consiguen exactamente todo lo contrario, es decir alargar innecesariamente la historia y hacer que canse un poco. Además, hay ciertas incongruencias en la historia, que, aunque no son para nada importantes o imprescindibles para la trama en sí, sí que es difícil pasarlas por alto ya que son unas cuantas. (Las pongo a continuación ocultas por si se pudiesen llegar a considerar spoilers) Por último, siento que la trama que a primera vista puede parecer la principal, que es el secuestro de Marfil, queda relegada a un segundo plano, ya que casi la totalidad de las 439 páginas que tiene el libro trata de un tira y afloja en la relación de Marfil y Sebastian, de pequeños acercamientos entre ellos y otra vez vuelta al punto de partida, produciendo que el libro no logre atrapar demasiado, en vez de combinar el misterio e intriga de descubrir quien está detrás del secuestro con el romance entre los protagonistas. En conclusión, es un libro que se deja leer si no vas con muchas expectativas y para mantenerte entretenido lo que te dure sí vale. Leeré la segunda parte, Ébano, solo para saber más a cerca de Sebastian, y para descubrir por fin más sobre quien está detrás del secuestro. Y espero que Marfil madure un poco y no me ponga tan difícil continuar con el libro. |