Todos nuestros diciembres

—Todos y cada uno de mis diciembres serán para ti. Te lo prometo.

A veces hay que arriesgarse y jugársela; si no, nunca conseguiríamos lo que queremos. Es cuestión de atreverse

—Primero, «todos los años» son las dos Navidades que llevamos juntos, no exageres. Y segundo, si lo llamas estúpido, me estás dando toda la razón, porque no respetas lo que me gusta a mí. No tienen que gustarnos las mismas cosas, eso sería aburrido, pero respetar y apoyar a la otra persona creo que son los pilares de una relación y la nuestra ya no se tiene en pie.

Para quienes sonreís al ver que en agosto empiezan a poner los decorados navideños en las tiendas y pensáis que la Navidad empieza el 2 de noviembre.