Vida después antes de la muerte

Algunos libros son un portal que devuelven a un lector diferente al que abrió su portada y se adentró en las primeras páginas. Son un viaje, una aventura, un descubrimiento del mundo, de otro mundo, que puede resultarnos ajenos, pero, siempre, de todas las ideas y emociones que habitan dentro de nosotros. Cada lectura nos redescubre.

Vida después antes de la muerte (Caligrama, 2023), llegó a mis manos tras intercambiar algunos correos con su autora, la doctora y escritora M.E.L. Romboli. A través de los avatares de una joven médico inmigrante que, además, es madre soltera, nos adentraremos en mil historias tan diferentes como conmovedoras. Aquel paciente homosexual que vivió en sus carnes la crudeza de la dictadura, la madre que decidió continuar con su embarazo aunque su vida se fuera en ello... Todos comparten unos últimos momentos vitales, tan importantes como el nacimiento, el comienzo del colegio o la graduación -cualquiera de ellas-. La muerte, esa desconocida que nos da tanto pavor, cuanta con un grupo de profesionales que facilitan los instantes finales al paciente y ayudan a encontrar la paz a sus familias.

Mientras, el mundo gira. El niño crece, la conciliación brilla por su ausencia. Los grupos de inmigrantes se entienden, se ayudan, se sienten fuera de su patria, pero creando una nueva familia elegida con el corazón.

🕯Y tú, ¿crees en la vida antes o después de la muerte?
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Es un libro que describe historias y vivencias de Alejandra una doctora de paliativos inmigrante que tiene que luchar por hacerse en hueco de manera profesional además de ayudar a sus pacientes a costa de su salud, no sólo física, sino psíquica y emocional. Ha sido como leer un diario de las historias que ha conociendo en el hospital y de ella misma. Hay historias que te desgarran un poco y otras que te dan alegría... Por un lado me ha gustado porque me gusta la manera en la que está escrita, la empatía de Alejandra que se preocupa ya no sólo del dolor de sus pacientes sino de su tranquilidad mental, su descanso o su paz. Pero por otro lado creo que para mí no era el momento de leerlo, me aventuré mucho por su título, pero creo que en este punto de mi vida no debería haberlo leído por mis propias vivencias. Aún así lo recomiendo porque también te hace reflexionar mucho sobre lo que tenemos y la suerte que albergamos al estar sanos, vivos y disfrutar de todo lo que nos ofrece la vida. Espero que lo leáis