Es la primera vez que un libro me deja tal incertidumbre para valorarlo y reseñarlo. No sé qué me esperaba, pero la trama y sobre todo el final me ha dejado sorprendida. Raúl es el protagonista, un joven huérfano que vive con su abuelo, El General. Tras suspender una asignatura su verano se complica de una extraña forma. Tiene diecisiete años, fuma porros, está enamorado de una joven que tiene novio, usa aparato dental y sobre todo, no sabe lo que quiere ni valora lo que tiene. La relación que se desarrolla entre Raúl y otra persona a lo largo de todo el libro, así como la naturaleza de la misma, es algo que no he entendido, y sobre todo el final me ha dejado descolocada. Nada tiene sentido. Raúl está constantemente pensando miles de hipótesis que podrían llegar a ocurrir si el dijese o hiciese algo diferente a lo que realmente hace, algo que para mí es excesivo, tantas cavilaciones sin sentido te sacan algo de la historia. Sin embargo, tiene algo que te invita a continuar la lectura, necesitas saber cómo termina el verano de éste joven aparentemente tranquilo. Lo mejor del libro ha sido el personaje secundario de El General, llegará a tu corazón, es realmente adorable y admirable. Quiero finalizar agradecieno el envío del ejemplar a Masa Crítica y a Editorial Elvira. Si quieres una lectura ligera, divertida y amena, este es tu libro. + Leer más |