Asesinato en Fleat House

En primer lugar, me gustaría agradecer a la familia de Lucinda Riley por decidir publicar esta obra olvidada de la autora. Asesinato en Fleat House es su primera incursión en la ficción criminal y es muy doloroso saber que no podrá seguir escribiendo más sobre este genero que prometía y mucho.
La inspectora Jazz Hunter ha renunciado a la Policía Metropolitana después de la ruptura de su matrimonio con un compañero detective, y se ha mudado a la campiña de Norfolk para renovar una vieja casa de campo y contemplar su futuro. Cuando su antiguo jefe le pide que investigue la repentina muerte de un alumno en un elegante internado local, disfruta de la oportunidad de tomar la iniciativa sin que su molesto ex la socave. Charlie Cavendish, un notorio matón, parece ser víctima de una sustitución de tabletas, pero ¿fue accidental o intencional? Luego, un miembro del personal es encontrado muerto y una de las víctimas de Charlie desaparece. Cuanto más aprende Jazz, más complicado se vuelve el caso, cuando todos los que entrevista tienen un secreto, y uno de ellos es un asesino...
La trama está articulada, tenemos varios puntos de vista, historias que parecen no tener conexión, pero que en realidad se cruzan en una historia hecha de asesinatos, suicidios, traiciones, herencias, secretos, amor, familia, fantasmas del pasado...
Lo encontré muy bien construida, nunca me aburrió y fue interesante volver a conectar todas las piezas del rompecabezas.
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Los personajes están bastante desarrollados y sobre todo me gustó mucho la protagonista, Jaz, una mujer fuerte, inteligente, muy real hasta en los errores que comete y de los que se levanta.
En conclusión,personajes complejos y bien escritos, misterio intrigante y bien tramado. Lo recomiendo totalmente, y leería el próximo libro si fuera una serie porque leer a Lucinda en cualquiera de los géneros que ella quisiese escribir era una maravilla.