Lo que más me ha gustado de este libro ha sido que apenas ha sido editado, es decir, que prácticamente uno está leyendo el manuscrito que un día esta autora escribió y nunca publicó. Y se nota. Se nota que apenas ha sido tocado por una editorial. Se nota en la falta de ambientación y en el desarrollo de personajes, y aun así ha sido un placer poder leer algo casi inédito. El caso, por otro lado, me ha gustado, pero tampoco es algo que sobresalga. La trama está bien planteada, pero muy intrincada. Y, personalmente, creo que los personajes han sido muy numerosos, aunque sí es cierto que cada uno tenía su papel bien definido. En definitiva, es un libro muy diferente a lo que Riley publicó después, pero tampoco hay que quitarle mérito al trabajo que hizo. Quizá este libro le sirvió para coger práctica y soltura a la hora de escribir sus posteriores historias. ¿Y no es así como siempre comienza un buen escritor? |