Carbono Modificado

'Carbono modificado' es el primer libro de la trilogía de 'Takeshi Kovacs' escrita por Richard Morgan. Puede que os suene más por haber sido adaptada en forma de serie de televisión en @netflixes bajo el nombre de Altered Carbon.

En este primer libro se nos presenta el mundo ideado por el autor. Un futuro donde el ser humano ha colonizado el Espacio y, lo más increíble de todo, ha vencido a la muerte. ¿Cómo? Transmitiendo la conciencia de la gente a una suerte de chips, las pilas, que pueden ser instalados en diferentes cuerpos, las fundas. Así, aunque el cuerpo muera, la pila puede ser transplantada, siempre que esta no sea destruida, claro está. Esto permite también los viajes intergalácticos, al ser tan sencillo transferir los datos que conforman a un ser humano de un tiempo y lugar a otro.
En este contexto, conocemos al personaje de Kovacs, un mercenario condenado y almacenado en su pila hasta que es reenfundado en otro cuerpo, en otro planeta. Su nueva vida ha sido costeada por un millonario, pero no altruistamente, sino a cambio de que realice un trabajo para él: investigar su propia muerte.

Así, lo que tenemos entre manos es una especie de thriller policial en un ambiente cyberpunk. Una mezcla explosiva 💥. A lo largo de las páginas, además de la acción y la trama en sí misma, se pueden extraer muchas reflexiones sobre la naturaleza de la vida humana.
Tengo que advertir que 'Carbono modificado' contiene bastante violencia física y sexual, consumo de drogas y, en general, escenas no aptas para todos los públicos.
Por otra parte, aunque se trata de una trilogía, este libro puede ser leído de forma independiente, pues la trama queda totalmente cerrada 👌🏻.

Si habéis visto la serie (la primera temporada), tengo que decir que aunque el fundamento sí es el mismo, algunos personajes y otros muchos aspectos de la trama cambian bastante respecto a la novela. También destaca que el original es bastante más salvaje que la adaptación, por lo que si os va la marcha, mejor que leáis el libro 😜.

He querido leer la novela de Richard Morgan antes de lanzarme a ver la serie. La premisa de la historia me parecía muy interesante. Estamos en un mundo donde te implantan una pila que recoger toda toda tu información, toda tu identidad y trasplantarla a otro cuerpo (funda) si fuera necesario. Hay cuerpos naturales o sintéticos. Esto hace que un individuo pueda vivir eternamente si tiene los medios necesarios para trasplantarse. Takeshi Kovacs pertenece al cuerpo de emisarios de la Tierra de Harlan, uno de los planetas donde la humanidad pudo expandirse. Funciona como una especie de detective. Ha sido traído a la Tierra para investigar el suicidio de un importante empresario (si bien, esta ya se ha vuelto a trasplantar). Por supuesto, nada es tan fácil como parece y Kovacs comprueba muy pronto que la Tierra puede ser un terreno muy hostil.
Es una novela de ciencia-ficción como envoltorio, pero la trama es novela negra, incluso hard-boiled, llena de personajes barriobajeros y malintencionados con doble moral o sin ella directamente. Tiene planteamientos muy interesantes acerca de lo que es la identidad del ser humano, la historia está llena de acción y es muy descriptiva tanto en estas escenas más violentas como en los encuentros sexuales que se suceden. Me parece un poco repetitiva, por eso no le he puesto las 4 estrellas, pero me ha interesado mucho la historia de Kovacs y no le perderé la pista.

Siglo XXVI. La humanidad se ha expandido a lo largo de la galaxia. Takeshi Kovacs es un mercenario y antiguo emisario espacial que fue capturado y almacenado por sus crímenes. Tras esto lo mandan a la Tierra, refundándolo en una funda de policía por iniciativa de un millonario, Laurens Bancroft. En Ciudad Bahía (Bay City, antigua San Francisco) este le pide que lleve a cabo la investigación de su reciente asesinato, disfrazado de suicidio. Esto le llevará a trabajar con la agente de policía Kristin Ortega, mujer de Bancroft, y enfrentarse a una panda de asesinos.

Esta trilogía es una perfecta combinación de la ciencia ficción, en su vertiente cyberpunk y distopía, y la novela negra, además de contener un humor demasiado negro. Los ricos se pueden permitir vivir eternamente, en copias de sus fundas y con múltiples copias de sus pilas. A estos se les conoce con el nombre de "matus" (en recuerdo del famoso Matusalén). El propio Bancroft es un matu. Kovacs es un hombre solitario, duro, con muchos tormentos y curtido en la guerra. Parece que va desbocado, sin un rumbo fijo y es un chulito prepotente.

Esta novela también tiene una trama para reflexionar sobre qué nos hace ser humanos. Aquí la muerte no existe como tal. Todos los humanos tienen una pila, una batería de memoria donde se almacenan todos sus recuerdos y conocimientos. Si el cuerpo, la funda, muere, la pila puede ser refundada en otro cuerpo diferente (aunque si tienes dinero suficiente puedes hacer copias de ti mismo). Solo uno puede morir definitivamente cuando esa pila es destruida y no hay más copias de ella. Con esto vemos una completa disociación entre cuerpo y mente. En esta obra hay una gran carga de crítica social sin ninguna duda. También hay una presencia de la religión, ya en bastante decadencia, y una crítica a la cultura.

Morgan describe a la perfección tanto los escenarios como los distintos personajes que aparecen en la novela. En cuanto al ritmo, este es muy ágil y atrapa al lector, dejándole con las ganas de continuar con la trilogía. Una obra con muchísima acción en un mundo que ha perdido la esencia humana, con una crítica social y una carga filosófica y con muchas escenas violentas y sexuales muy explícitas.
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Me ha gustado mucho. El tema del reenfundado me ha dejado loca. No soy capaz de imaginar lo que tiene que ser cambiar de cuerpo como quien cambia de ropa o que no puedas volver al tuyo porque otra persona lo ha comprado y verte a ti misma pero que no seas tú... Buff. ¡Demasiada locura!