Greg es un adolescente retraído y solitario. Su padre es un cirujano plástico que nunca está en casa, su madre está obsesionada con el estatus y la decoración y su hermana menor sólo se preocupa por sus ensayos de baile. Pero el principal problema de Greg son Ellas: Ellas, que imaginariamente lo persiguen por todas partes; Ellas, que lo paralizan; Ellas… Las arañas. Pero una tarde cualquiera, durante un breve segundo, encuentra la sonrisa de Alice y eso le basta para llenar el vacío de su vida. Sin saberlo, ella se convertirá en su interlocutora, en su obsesión. • Todavía no sé muy bien como reseñar este libro, literalmente fue una lectura súper rara, “muy turbina”. Nuestra protagonista es Greg, un chico con muchas fobias que no puede controlar y al cual nadie entiende. El libro está relatado como un diario en donde escribe sus vivencias y que lo ayuda como una forma de canalización, aunque, también tiene transcripciones policiales que nos anticiparan un poco acerca del futuro de nuestro protagonista. La cuestión es porque el libro se llama Alice y la mosca, si nuestro protagonista es Greg. Alice es una chica que asiste al mismo colegio que él y con la cual viajaba en bus, en realidad, nuestro protagonista hacía el mismo camino que ella y esto se empezó a convertir en una obsesión. Empieza a escribir el diario dedicándoselo a Alice, como si estuviera hablando con ella cuando en realidad no es así. El escritor trata temas muy serios y que no deben ser tomados a la ligera: la fobia por “ELLAS”, el bullying que le provocan sus compañeros y hasta su propia familia, cuando ve a una de Ellas tiene ataques de pánico horribles y por eso lo llaman psycho. • En cuanto a la frase: “es un libro sobre el amor, sobre encontrarlo y protegerlo” NO, no es así. A pesar de los problemas y de cómo lo trataban, lo de Greg por Alice era una obsesión peligrosa y eso no es amor. • Este libro no me dió lo que esperaba aunque el final, si me sorprendió. Calificación: 2,5/5⭐️ + Leer más |