Excelente. Un poemario escrito desde el corazón y con capacidad para hacer que el de cada lector reviva momentos buenos y no tan buenos. El poemario se inicia con un poema que da nombre al libro. En este breve texto el autor nos muestra con tan solo unos versos que, lo que en un momento puede parecernos que estamos locos por alguien, puede ser un espejismo pasajero y la verdadera locura, con toda su fuerza, está por llegar cuando la relación se acaba. A este poema lo siguen ciento trece. Todos ellos hablan del amor y del desamor, pero sobre todo de este último. Si algo me ha gustado por encima de todo es que son textos que podrían haber sido escritos por cualquiera que haya estado enamorado, es decir, que cualquiera que haya estado en esta situación puede hacerlos suyos y sentirse protagonista de sus versos. Lo que hace que cada verso se saboree y que nos haga rememorar momentos vividos. En lo relativo a la edición, está muy cuidada. Cada poema se presenta con un título y en páginas independientes, siendo muy pocos los que abarcan dos páginas. Además, algunos de los poemas están acompañados por dibujos hechos a mano alzada y en blanco y negro. Sinceramente, creo que la portada desmerece el contenido. Es cierto que el reloj, y con él el tiempo, tienen una importancia evidente en las relaciones. Un mismo tiempo que puede parecer que pasa de forma desenfrenada o que se ralentiza hasta lo no medible. Sin embargo, pienso que la portada habría resultado más atractiva si el título hubiese estado centrado y el reloj solamente apareciese, como lo hace, como una leve sombra en el fondo. En definitiva, me parece un libro muy recomendable para cualquier lector, sea o no asiduo a la poesía; y ello por el poder que tiene para que el lector se sienta protagonista de sus versos. + Leer más |