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Una vez más la pluma de Lorena me inunda el corazón con una mezcla explosiva de amor y lágrimas. Es increíble lo bien q escribe los dramas románticos con muertes de seres queridos como telón de fondo. Consigue poner la piel de gallina con varias escenas, por no hablar del apoteósico final q te destroza el alma en mil pedacitos con su correspondiente llorera a moco tendido. Mención especial a una escena en la q sientes como tuyos el miedo, sufrimiento, ataque de ansiedad y todo lo malo q imagina el prota en plena morgue. Chapeau por ese momentazo! Sus personajes son naturales y realista, cargados de tanto dolor intentando ser fuertes y salir a flote q es inevitable amarlos desde el primer momento y deseas q todo acabe bien para ellos. Todos los acontecimientos q transcurren son creíbles y su amor de película también. Un personaje secundario es tan maravilloso e importante q para mí está a la altura de los protas. El inconveniente q tuvo para mí está novela (cosa q fue totalmente a la inversa en su anterior novela) la cantidad de lugares y calles de París q nombra y describe, como un tour, el problema es q si nunca has estado en París es difícil ubicarse y pasa a ser un poco irrelevante, quedándote solo con los lugares básicos q todos conocemos. Sin embargo si conoces la ciudad la sensación de volver a pasear por sus rincones será maravilloso como me sucedió con Edimburgo en su novela "todas las canciones hablan de ti". En esa novela el tour fue un plus pero en esta me restó. Otra cosilla q no me convenció fue q se me quedó un poquito escasa la explicación final de lo q le sucede a un personaje q es sumamente importante ya q debido a él se crea la personalidad y situación del chico protagonista. Creo q tendría q habernos contado con detalles todo lo q le pasó. En definitiva Lorena ha sido uno de mis descubrientos del año y seguiré leyendo sus novelas xq su arte es indiscutible. |
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