La maniobra de la tortuga

Cuando una es amante de la novela negra, se acerca a ella queriendo toparse con una serie de elementos que la caracterizan y Benito Olmo consigue plasmarlos todos en esta novela: una trama repleta de acción, asesinatos, corrupción y un protagonista peculiar.

He tenido la sensación de estar leyendo una obra que hace un buen homenaje al género. Una historia que se desarrolla en Cádiz y que comienza con el asesinato de una chica de dieciséis años. Un punto de inicio que pondrá en marcha al inspector Manuel Bianquetti. Paralelamente, nos acercamos a la historia de Cristina, una mujer con un pasado doloroso y que se mueve alrededor de un tema bastante crudo y por desgracia de eterna actualidad.

Los capítulos son bastante amenos, por lo que el libro se lee con bastante rapidez. El caso se va esclareciendo con fluidez, lo que hace que el lector no se aburra en ningún momento.

En definitiva, creo que en cierto modo estamos ante un buen ejemplo de lo que es la novela negra más tradicional, la que nos habla de inspectores que se mueven siempre al límite de la ley, en la que se producen frenéticas persecuciones y las que presentan una dosis de violencia propia de este género.

Me ha mantenido entretenida y pegada a sus páginas. ¿Qué más se puede pedir?