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Es mi primer contacto con la autora y... ¡quiero más! Me ha encantado descubrir rasgos de la cultura y el folclore nigeriano y, por supuesto, conocer a Sunny, la protagonista y a los amigos que hará en el camino que la llevará a un mundo fantástico y lleno de magia. Al leer este libro mis pensamientos se fueron directamente a Harry Potter ya que he notado alguna que otra similitud. Me ha sorprendido gratamente la narración y el hecho de incluir páginas en el libro de un libro mágico ficticio que lee Sunny al comienzo de la exploración de su nueva vida. Al principio me sentí perdida pero poco a poco fui entendiendo los hechos y a los personajes. Creo que la autora, intencionalmente, quiso crear esta sensación en el lector para acompañar así a Sunny en el descubrimiento del mundo mágico. La historia no sólo habla de magia sino también de la importancia de la amistad que se ve reflejada en Sunny y sus extravagantes amigos. También hay rasgos de bullying porque nuestra protagonista tiene un rasgo poco común, es albina, y ello le acarrea algunos problemas a la hora de ser aceptada por otros compañeros de clase (en mi opinión, bastante crueles). Pero aquellos sucesos no conseguirán hundirla y paso a paso se hará más fuerte y aprenderá a superar todos los obstáculos que la vida le deja en el camino. Juntos deberán enfrentarse a una fuerza mayor que acecha con destruir todo lo que saben y todo lo que están aprendiendo y descubriendo (en el caso de Sunny). Estarán expuestos a varias situaciones peligrosas y envueltos en muchas aventuras. Es una lectura muy amena, atrapante, que te invita a seguir leyendo y llena de una magia distinta a la que estamos acostumbrados, diferente y original. ¡Tengo muchísimas ganas de leer la segunda parte! |
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