Todo lo que me ha llegado en los últimos años sobre Mónica Ojeda era muy bueno, así que elegí "Las voladoras" como primer acercamiento a la obra de la autora. "Las voladoras" es un conjunto de ocho relatos donde la autora mezcla el terror, el folclore y la fantasía, todo tiñéndolo de una cruda realidad. Prácticamente todos los relatos dan mal rollo, te ponen los pelos de punta y te dejan con ganas de más. Algo muy a valorar, ya que rara vez encuentro libros de relatos que mantengan el nivel entre ellos. No quiero destripar mucho cada relato porque todos tienen ese toque de misterio y sopresa, pero como digo, casi todos me han gustado por igual. En "Las voladoras", relato que da nombre al título, nos encontramos con mujeres que vuelan y se cuelan de noche en las casas; la protagonista de "Sangre coagulada" tiene una extraña obsesión por la sangre; una traumatizada profesora recoge una cabeza de su jardín en "Cabeza voladora"; en "Caninos" nos encontramos con una chica con un extraño apego a una dentadura postiza; "Slasher" nos muestra la extraña y perturbadora relación entre dos gemelas; "Soroche" nos habla de la relación entre cuatro amigas; asistiremos a un terremoto apocalíptico en "Terremoto", y por último, un chamán tratará de revivir a su hija en "El mundo de arriba y el de abajo". Cada relato tiene su algo interesante, pero mis favoritos han sido "Cabeza voladora", "Slasher", "Sangre Coagulada" y "Soroche". La pluma de la autora me ha parecido una gozada, y ya estoy deseando leer alguna de sus novelas. Ojalá mantenga esta estela tétrica y terrorífica que he descubierto en estos relatos. La autora consigue despertar ese miedo en lo más cotidiano, pero a la vez lo mezcla con fantasía. Una de las autoras más interesantes que he descubierto este año. |