Pequeños fuegos por todas partes

Por fin terminé esta historia.
Un libro que lleva su tiempo leer. Intenso, con una prosa que, aunque a veces descriptiva de más, te encandila. Me quedo con la forma de escribir de la autora, sin lugar a dudas.
Entre las páginas de este casi thriller doméstico (ficción narrativa con cierta intriga) se debaten una serie de temas que he encontrado sumamente interesantes y sobre los que no había leído antes. Ambientado en los años 90, en una zona residencial de gente adinerada y acostumbrada a una serie de normas y reglas, la llegada de Mía y su hija Pearl, lo revuelve todo. Surgiendo debates como la moralidad detrás de la maternidad subrogada (vientre de alquiler) y lo que supone para l@s implicad@s, la adopción, la maternidad, toda la escala de grises dentro del rol de una madre, su relación con sus hij@s... ¿Quienes son realmente los padres, los que engendran y dan a luz al bebé, o aquellos que lo cuidan y le ayudan a crecer?
Con ciertas pinceladas sobre el racismo existente en esa época (aún presente hoy).
Recalcar la personalidad de Mrs Richardson, Cuando su vida siempre ha sido A, B y C, y de repente llega alguien que ha vivido como ha querido, saltándose las normas, libre. ¿Haces siempre lo correcto porque te sale de dentro, o porque buscas sentirte mejor contigo mism@ y esperas la recompensa de después?
Una serie de preguntas para reflexionar, porque si con algo me quedo de esta historia, es estas reflexiones y cuestiones que se quedan en el aire. Con ese toque a Matilda de: “se han portado mal, ¿que vas a hacer al respecto?
Aunque algo lento por momentos, un libro muy interesante.
Le daré una oportunidad a la serie de Amazon Prime Video. Curiosidad por ver como han representado todos estos matices.