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Como ya es sabido, éste libro es la continuación de uno de los personajes "Cilka" , que aparece en el libro El tatuador de Auschwitz. Lale, protagonista del susodicho, se encargó de contar su historia con Gita y a la vez dejó una semillita en dónde la autora Heather Morris supo sembrar en éste libro. En mi opinión personal, esperaba más. Después de pasar por Auschwitz, Cilka fué juzgada por colaborar con los nazis ofreciéndoles servicios sexuales y por supuesto obviaron que fué por supervivencia. Entonces fué enviada al gulag de Vorkutá, a cumplir unos 15 años a trabajos forzados. Junto a otras personas que iban a parar allí, ella compartió barracón con otras mujeres. Lo que también fué abusivo estar condenada a trabajar en las minas, un trabajo muy duro y con pocas esperanzas de vida, pero también por supervivencia y dedicación pudo conseguir un puesto que le aportó una vía de escape a su destino, aunque el miedo, la preocupación y los abusos nunca terminaron. |
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