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“La novia gitana” es un thriller complejo y absorbente. Narrado en tercera persona desde varias perspectivas, el personaje central es el de Elena Blanco, la inspectora que lleva la investigación de la muerte de una gitana a punto de casarse. El modus operandis es prácticamente el mismo que el asesino utilizó 7 años antes con su hermana Lara, que también iba a casarse. El problema es que hay alguien en prisión pagando por el primer crimen; entonces, ¿quién mató a Susana Macaya? Si hay algo que destacar de esta novela es en lo bien escrita que está y el amplio abanico de personajes, todos con su importancia y muy bien perfilados, en una trama que se va por otros derroteros a medida que avanza. al principio el ritmo es algo lento; luego todo se vuelve trepidante y nuestro interés hacia el personaje de Elena va en aumento cuando sabemos “su secreto”, algo que, al final, da que pensar en una segunda novela con este personaje. Seguro que Carmen Mola, que me arriesgo a decir que se trata de un hombre y no de una mujer, ya está trabajando en la siguiente novela. Clanes gitanos; muertes gores con agujeros en el cráneo y gusanos comiendo el cerebro; la narración, también en tercera persona, de un niño encerrado en una nave que mata a un perro; sospechosos por todas partes... creo que es bastante imprevisible y sorprendente. |
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