La novia gitana

Expulsan a un hombre de un teatro por ser muy feo.

La línea que separa el bien y el mal es más resbaladiza de lo que a ella le gustaría.

Se pregunta hasta dónde llega la responsabilidad de una madre, en qué momentos hay que dejar a los hijos volar solos, sin la mirada vigilante y la tutela obsesiva. No hay tregua, ni descanso, se dice. A los hijos hay que cuidarlos todo el tiempo, incluso cuando no estás con ellos.

Nosotros podemos equivocarnos veinte veces, pero si acertamos una, lo descubriremos; él puede acertar veinte veces, pero si falla una, lo descubriremos. Es una cuestión de estadística

Retrasar las cosas es mantener los nervios dentro del estómago más

La línea que separa el bien y el mal es más resbaladiza de lo que a ella le gustaría

Sino hueles a los policías no tienes futuro en la calle.

El sadismo oculto de la gente sale a flote en el momento menos pensado

¿Y si mañana (y subrayo el si)
de repente te perdiera?
Habría perdido el mundo entero,
no sólo a ti.

“Hay momentos de quietud y de belleza que parecen insinuar algo, que la felicidad está al alcance de la mano y que solo hay que abrir el corazón y vaciar la mente para recibirla sin reservas”.