Empecé a leerlo con la idea de que siendo cuentos cortos, podría ir leyéndolo en mis ratos libres. Lo que no sabía era la forma en la que te enganchan estas pequeñas historias escritas de una forma tan maravillosa. Belén es capaz, en las pocas páginas que ocupa un cuento, de atraparte en mundos mágicos y de fantasía, o de ponerte la piel de gallina con increíbles, misteriosas y sobrecogedoras historias, o de acariciarte el alma con maravillosos poemas. Algunos de los cuentos tienen final abierto, otros queda la trama resuelta de principio a fin. En definitiva, es una recopilación muy variada que, sin darte apenas cuenta, vas a devorar por la agilidad con la que se leen.
|