 |
Mi experiencia de lectura fue rara, así que mi calificación también lo es. Creo que con 3.5 está bien. No quiero redondear hacia abajo porque no merece menos que Twilight (y mucho más tampoco, siendo sincera). Esto de las estrellitas a veces es más difícil que tratar de entender por qué lo que parecía una buena historia por poco termina autodestruyéndose. Sí, es el caso de este libro. El argumento me pareció original. Una invasión de alienígenas pacíficos (suena contradictorio, pero ahí es donde está el conflicto), un método atípico de control de los humanos (a nadie se le lava el cerebro, directamente se pone una nueva conciencia), un nuevo orden (que tapa el desorden, claro), un grupo de rebeldes, la posibilidad de la existencia de otros mundos con habitantes raros (y nombres cursis, también). Eso me encantó. Dos puntos a favor ¿Y cuál es el problema? Otra vez, el amor entre distintas especies metido en el medio ¿Por qué? Porque sirvió para evadir cuestiones que podrían haber mejorado el libro. al terminarlo, me di cuenta de que la invasión era sólo una excusa para contar la historia de amor, y no al revés. Tengo que ser justa y decir que Meyer mejoró mucho la escritura. de hecho, es más elaborada y más absorbente (un punto a favor) que la de Twilight , aunque eso no significa que sea perfecta. Algunas descripciones me parecieron innecesarias. Noté que generalmente son las que se relacionan con los movimientos del cuerpo, por ejemplo. El cuerpo... Es uno de los temas centrales que desdibujan otros que podrían haber quedado mejor en ese lugar. Melanie y Wanderer son dos personas ocupando simultáneamente el cuerpo que le pertenece a una sola (las interacciones entre ellas son lo mejor del libro. Medio punto por eso). Hasta ahí es aceptable. Pero también hay otros que empiezan a volverse pesados reclamando el título de propiedad. Horrible. Resultado: todo termina siendo una discusión sobre envases vacíos y conciencias intercambiables. Nada de acción. Los personajes no me despertaron demasiada simpatía y/o interés, salvo Jeb y la buscadora (con un poco más de desarrollo, hubiera dado el batacazo). Wanderer es el alma más buena y correcta del mundo (en algunos puntos, es muy parecida a Bella y, en otras, a Edward)... pero acepta la violencia de los humanos porque cree que la merece. Y se confunde por culpa de Ian y Jared, los "galanes", esos que me pasé odiando la mayoría del tiempo. Melanie es el débil intento de diferenciación: es menos delicada y más agresiva en sus acciones, pero no va más allá. Los recuerdos sobre su vida no me alcanzaron para conocerla demasiado. Y Jamie "Vivo abrazado a la cintura de mi hermana" Stryder es el personaje más inverosímil de todo el libro. ¿Conclusión personal? La historia de amor ocupó demasiado espacio. Ahora que lo pienso, también es un parásito, pero del argumento "casi principal". Me quedaron dando vueltas muchas preguntas acerca de la invasión que nunca se respondieron. No sé si dejaron el misterio para una posible secuela o qué, pero si tengo que atenerme sólo a The Host , es un descuido. |
>
