La historia, escrita por la talentosa autora mexicana Fernanda Melchor, nos sumerge en un mundo oscuro y turbulento donde la violencia y la desesperación se entrelazan con las vidas de los personajes. La narrativa de Melchor es poderosa y visceral. Utiliza un estilo de escritura crudo y audaz que te sumerge de inmediato en la atmósfera opresiva del pueblo en el que se desarrolla la trama. A través de una serie de voces narrativas, la autora teje una historia compleja y multifacética que gira en torno al asesinato de una bruja local y las consecuencias devastadoras que esto tiene para la comunidad. Los personajes son intensos y memorables, cada uno con sus propias cicatrices y secretos. Melchor explora temas profundos como la misoginia, la homofobia, la violencia de género y la corrupción con una sinceridad brutal. Su capacidad para revelar la complejidad de la psicología humana y las dinámicas sociales es impresionante. Leer este libro fue una experiencia interesante para mí. Hay tanta acción sucediendo y tantas formas en que el trauma sigue a cada personaje que logra crear un sentimiento asfixiante que poco a poco envuelve a los personajes y a su vez a los lectores y Melchor es implacable en esta experiencia. La ciudad se siente como una cárcel en la que no hay escapatoria y la pobreza acecha en cada rincón. Es más que brillante cómo Melchor es capaz de crear esta atmósfera y sumergir al lector en ella. |