Una vida

Una vida, gran novela de Guy de Maupassant, cuyo gran maestro fue nada menos que Gustave Flaubert, no me sorprende encontrar en esta obra como retazos que me recuerdan a "Madame Bovary", gran obra de Flaubert.

La trama se desarrolla a partir de la salida del convento, con 17 años, de Jeanne, quién es una joven soñadora y un tanto sumisa, estas cualidades son las que afectarán, más adelante, en su vida personal pues en poco tiempo todo eso que la hacía caer en ensoñaciones propias de una joven que nada sabe de la vida y ver la realidad de ella, esa que de repente te golpea en la cara sin esperarlo siquiera.

Como poco se espera de ella salvo casarse, pues ahí que aparece Julien, un personaje muy peculiar, pues al pronto parece un hombre sencillo, con una renta "aceptable" y que es físicamente guapo y aseado y claro, a falta de pan... ¿ya sabéis lo que sigue, verdad?

Así que ahí van sus padres, el barón y la baronesa, alías "mamaíta" a arreglarlo todo porque dinero no les falta y son bastante derrochadores, cosa que casi es mejor que tener tan atado el cinturón que hasta hace daño como poco después se verán obligados a vivir gracias al yerno, ese ser que pasa de ir de taimado a ser peor que" Ebenezer Scrooge" , ese mítico personaje de Dickens ... y que tanto nos recuerda a la Navidad, ¿verdad?

Voy a destacar a los padres de Jeanne, porque aunque ya son mayores pero durante toda la lectura siempre piensan en el bien de su hija, la ayudan, la comprenden, apoyan , etc... lo más sorprendente es que están muy adelantados a su época, en cuanto a ideales filosóficos y religiosos, poniendo la física por delante de la religión incluso no siendo practicantes, en pleno siglo XIX y en un pequeño pueblo de Francia, donde lo más normal es que estén los mismos parroquianos de siempre ( nunca mejor dicho...ja ) y un cura que resulta que ha realizado hasta un exorcismo... ¡¡¡ que tiemble el padre Karras !!!

Así que encontramos: Casamiento, hijo, infidelidades, engaños, pésima economía, confusiones, entre otras cosas, y esa crítica a la sociedad tan presente en esta historia ...haciendo que la pobre Jeanne no le encuentre mucho sentido a la existencia, siempre tan monótona y sin que ocurran grandes cosas que le hagan feliz, a excepción de su hijo que la convierte en madre y mujer obsesiva en sus cuidados en un intento de encontrar consuelo y alegría a su infeliz vida.

Un gran libro con un espectacular estilo que emplea Maupassant en su escritura, realmente admirable, de una riqueza exquisita y medida con la balanza más fina, con unas descripciones muy bonitas del entorno que rodea donde viven nuestros protagonistas, haciendo del lugar un ensueño.

Te hará pensar y reflexionar, con momentos que te hacen reír por las situaciones tan surrealistas y otras veces son muy emotivos y sobre todo empatizas con la protagonista desde el principio, que tiene la desgracia de cruzarse con el hombre que le llenará de males y del que por sus acciones se cuestionará muchas cosas, hasta su fe... porque no entiende cómo ha tenido un destino de sufrimiento teniendo un alma noble y un corazón sensible.

Pero bueno, supongo que la vida no es nunca ni tan bella ni tan mala como se la cree, ¿verdad?