Matheson nos adentra en un mundo de desesperación con esta novela. Podemos ver en ella muchas de esas características que permitieron que sus historias fuesen llevadas al cine por Hitchcook, ó Spielberg. El mundo se sume en el caos, la humanidad se está transformando, pero nuestro protagonista sigue intentando dar con esa cura, que permita volver a aquellos que se han ido. Sus congéneres se han convertido en vampiros y no hay día que pase, desde su soledad, en el que los pensamientos más oscuros lo dejen de asolar. Con gran tensión este maestro del género nos lleva primero a la caza de esos seres, para intentar encontrar un antídoto, y después a la desesperación de saber que el tiempo se acaba y no quedará ningún ser humano sobre la faz de la tierra. |