Dani y Jun son opuestos, diferentes culturas, diferentes valores, ella es española y se mudo a Londres dejando atrás su doloroso pasado, él es coreano y su cultura y costumbres son muy diferentes, tiene a su madre organizandole la vida con viejas tradiciones, ella es diseñadora de moda, él tiene un estudio donde hace videojuegos, dos polos opuestos, que un día se cruzaran por casualidad y sus vidas…. cambiarán…. Dani y Jun, se llevan un huequito muy especial de mi corazón, me encantó la historia y cómo se desarrolla, y me encantaron ellos, los dos. Una lectura tranquila, sin sobresaltos, que me fue calando poco a poco, que me hizo enamorarme de sus personajes, aunque a algunos en un momento dado, me hicieran frustrarme y no entenderla, y la tranquilidad de la lectura se acabó con ese capítulo, en el último tramo del libro, que realmente me lo hizo pasar fatal. Contada a dos voces por sus protagonistas, con capítulos cortos, que yo particularmente agradezco, y una historia, para mi, preciosa. Y como siempre, María vuelve a conseguir enamorarme y mantenerme enganchada a sus historias. Aunque es autoconclusivo, estoy deseando leer el segundo, porque seguro que su historia también es preciosa. Y no puedo dejar de decir, que estoy completamente enamorada de su portada y contraportada, me parecen preciosas. |