A la caza de Houdini

Audrey Rose y Thomas Cresswell se encuentran a bordo de un lujoso transatlántico que se convierte en una horrorosa prisión flotante cuando un asesino termina con la vida de los pasajeros uno por uno… y no hay lugar adonde escapar.

Al emprender un viaje de una semana por el océano Atlántico a bordo del opulento RMS Etruria, Audrey Rose Wadsworth y su compañero de investigaciones, Thomas Cresswell, se ven deslumbrados por una compañía itinerante de artistas de circo, videntes y un carismático joven escapista que entretienen por las noches a los pasajeros de la primera clase.

Audrey Rose y Thomas deberán resolver estos casos espeluznantes para evitar que más pasajeros mueran antes de llegar a destino.

En este libro abunda la magia, estamos en un barco donde todas las noches ocurren funciones de magia e ilusionismo. Esta parte me gustó, le aportó mucho a la ambientación para hacerla diferente a los otros libros.

Tenemos nuevos personajes muy interesantes, como es el caso de "Mephistopheles", el principal encargado de los actos de magia dentro del barco. Me pareció un personaje muy interesante ya que me costó mucho sacarle la ficha y conocer sus intenciones, pero ya al final del libro se muestra más humano fuera de tanta magia y me pareció un personaje genial que le aportó demasiado a la historia, aunque haya sido uno de los responsables de mi enojo mientras leía, pues hacía peligrar la relación entre Audrey y Thomas.