No me canso de decir que Myriam es un "save place". Sus libros son los que siempre me sacan de bloqueos o me hacen desconectar del mundo a niveles insospechados. Vamos, que me pongo a leer y se me pasa el tiempo volando. Este libro me ha gustado muchísimo porque mezcla muy bien la parte thriller con la romántica. Lo más curioso es que, a pesar de esto, esperaba más humor a lo Myriam y pese a que no ha habido (sí humor negro), no me ha importado nada. Integra muy bien cada elemento para hacer que no puedas soltar el libro. Y, por supuesto, habla de cosas importantes como el sentirnos bien con nosotros mismos, la autoaceptación, el amor, la perseverancia, el abuso de sustancias... Hay más, ¿eh? El tema de la psicopatía lo aborda guay en el libro. Los personajes están perfectamente definidos y consiguen que empatices con ellos. Bueno, con unos más que con otros. Por ejemplo, hay muchas cosas que entiendo de la forma de actuar de Sally Anne, pero otras que me hacen querer tirarme del pelo. Pero eso me sucede con muchos otros personajes. Algo muy guay de este libro es que hay capítulos contados por los personajes disfrazados. Me explico: todo se va a desarrollar en torno a una fiesta de Halloween en la que tienen que ir disfrazados. Bien, pues Myriam nos va dando pistas de quién lleva cada disfraz a lo largo del libro, lo que genera un juego con el lector, que tiene que ir descubriendo quién es quién. Y, como siempre, leed a Myriam. Sus libros son maravillosos. + Leer más |