La novela se desarrolla en 2 líneas temporales que se van alternando: por un lado, en el presente, acompañamos a Laura a lo largo del Camino de Santiago; por otro lado, vemos distintos momentos del pasado de Laura que nos ayudan a conocer quién es realmente. El libro deja ver el amor que el autor siente por su tierra, la fascinante Galicia, y se contagia tanto que dan ganas de levantarse e irse a hacer el Camino enseguida. A lo largo de sus páginas, vamos descubriendo los misterios prácticamente a la vez que la protagonista. Su lectura es ágil y mantiene en vilo al lector hasta el final. Manel Loureiro es un escritor por el que siento debilidad, necesito comprar sus libros el mismo día que los saca y leerlos al momento. Este libro me ha tenido enganchada de principio a fin, si hubiera tenido tiempo lo habría devorado en un par de días. Ahora sólo me queda esperar al siguiente |