Un inicio de trilogía potente, adictivo e intrigante, con un final bastante cerrado y una premisa fascinante que sirve al autor para especular con gran originalidad sobre un sinfín de temas, llevando al lector a reflexionar sobre otros tantos. Historia, ética, ciencia, filosofía, geopolítica... todo hilado con ideas y conceptos tremendamente imaginativos. Como siempre sucede con Cixin Liu, los personajes pasan a un segundo plano, convirtiéndose en meros vehículos para la trama, que (como contrapunto) es compleja y absorbente. Algo a tener en cuenta, junto con las altas dosis de contenido científico y tecnológico, si queréis adentraros en sus libros. |