Me ha parecido interesantísimo. Tener la oportunidad de conocer tantas pequeñas grandes historias de Pekín ha sido maravilloso. Lo primero que me llama la atención es el formato del libro. Una edición cuidadísima que evoca a los cuadernos de viaje de esos grandes viajeros del XIX que iban intercalando con sus textos y anotaciones dibujos delicadísimos. Todo recuerda a esos cuadernos, el tamaño, la estructura, las ilustraciones, que además son una maravilla en sí mismas. Incluye también un mapa en el que podemos ubicar las distintas localizaciones que aparecen en el libro y un apartado para nuestras propias notas. Yo soy una enamorada de este tipo de cuadernos y sus historias de viajes así que por ahí ya me había ganado desde el primer momento. En cuanto al texto en sí nos encontramos con veinte relatos que van recorriendo distintos momentos históricos de la ciudad. Tenemos relatos ubicados en el s. X, en el XV, durante las guerras del opio en el XIX. El nexo de unión y lo que da sentido al libro- cuaderno es que todos ellos van vinculados a algún lugar emblemático de la ciudad y que podemos visitar actualmente. Siempre al final del relato encontramos estas referencias. En cuanto a los relatos, cada uno de ellos tiene una entidad diferente unida al momento histórico en que se desarrolla. Muchos, los más antiguos, tienen mucho toque de leyenda, mágicos… otros son más históricos, pero ninguno, ninguno decepciona, o al menos a mí no. Entre mis favoritos están las historias de Nezha, que es mitología pura; la de Wang Zhen, a quien se debe el Templo de Zhihua; la de Ferdinand Verbiest, que nos narra las vivencias de los jesuitas durante su presencia en Pekín y del Observatorio Imperial de Pekín del que aún se conserva la torre; la de Ma Tengyun, con la que conocemos a los Hui, etnia de cultura musulmana; y por último la de Lord Elgin que narra la destrucción del Antiguo Palacio de Verano y el traslado a la Ciudad Prohibida y en el que aparece la emperatriz Cixi. Como son relatos cortos, su lectura es muy fácil, ya que en cualquier momento puedes ir leyendo de uno en uno. Mi primera lectura ha sido así, he ido leyendo uno en cualquier momento libre, entre una actividad y otra o uno antes de dormir… pero me quedo con ganas de hacer una segunda lectura más reposada en la que pueda ir consultando todos los hechos y personajes que van apareciendo en cada historia, investigando sobre los lugares que menciona, etc. Creo que de este modo da para muchísimo y me quedo también por supuesto con ganas de visitar Pekín, así que muy, muy recomendado este Historias de Pekín. + Leer más |