Hace ya unos años que leí La Princesa de Hielo y, si bien me pareció entretenido, no vi la gran novela de la que hablaba todo el mundo. Decidí dejarla en barbecho un tiempo y ahora que leí el segundo, diría que la cosa cambia poco. El libro en sí me ha parecido más entretenido que el anterior, y creo que la autora se ha esforzado más por perfilar no solo a los protagonistas, sino a todos los personajes de Fjällbacka, de cara a futuras entregas. La ambientación me sigue gustando y se agradece el esfuerzo, pero sigue sin convencerme su forma de escribir. Abusa demasiado del recurso de cerrar los capítulos con una información que descubren los personajes y que el lector ignora. Y además, me da que quiere confundir al lector metiendo a muchos sospechosos, pero no crea bien la tensión, ya que tan pronto como los mete los quita, en vez de sembrar la duda desde el principio. Como digo, es una lectura entretenida y no descarto continuar más adelante, pero consciente de que será de relleno entre lecturas más redondas. |