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Me ha faltado un poco más de desarrollo de los personajes, el inició promete y es bueno pero no va en consonancia con el resto de la novela. Aún así es entretenida con capítulos cortos,al principio parece que va por el mundo de las drogas pero acaba por otro asunto peliagudo de nuestra historia, pero el fallo del libro es por el camino que el grupo de Ertzaintza lleva la investigación, se obcecan en unos personajes,pero se olvidan de una parte importante del grupo, más aún cuando te va contando una historia pasada de un niño maltratado. Y leyendo el final, me preguntó si es el mismo asesino que ha matado a la periodista.
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