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"Cuando desaparece un niño, uno experimenta todo tipo de emociones. Enfado, pánico, negación, culpa. Las he visto todas, aisladas y combinadas". '¿Quién se ha llevado a Daisy Mason?' Cara Hunter 2018 Duomo Ediciones, 2020 399 páginas Trad.: Begoña Prat Alguna vez aparece por aquí la clásica pregunta de "¿Qué libro recomendarías para salir de un bloqueo lector?". Desde este momento recomendaré sin dudar '¿Quién se ha llevado a Daisy Mason?', de Cara Hunter. ¿Es una obra maestra? No. ¿Va a ser mi mejor lectura del año? Tampoco. Pero es un libro adictivo, bien escrito, plagado de cliffhangers y plot twists, con personajes complejos y un final que te deja con la boca abierta. No se puede pedir más a una lectura de verano, la verdad. Daisy Mason es una niña de ocho años que desaparece durante una fiesta en su casa. ¿Pero alguien la habrá visto?, diréis. Pues no. Daisy desaparece de su propia casa ante decenas de personas sin que nadie haya visto nada. Desde este momento, se inicia una investigación frenética dirigida por el inspector Adam Fawley para tratar de esclarecer qué ha ocurrido con la pequeña. Una telaraña de celos, traiciones y engaños torpedeará unas pesquisas que tocarán temas tan sórdidos como el maltrato, el bullying o la pornografía infantil. La escritura de Hunter es dinámica y logra meterte en el cuerpo el frenesí de la investigación contrarreloj para encontrar con vida a Daisy. No hay capítulos al uso, pero sí hay escenas cortas que se van sucediendo de forma rápida para dar dinamismo a la historia. Además, va intercalando flashbacks de los días y semanas previos a la desaparición para que el lector pueda comprender qué motivos podría tener Daisy para desaparecer o qué motivos podrían tener los diferentes personajes para hacer desaparecer a Daisy. La decisión de Hunter de utilizar en la narración recursos como emails, tweets, posts y comentarios de Facebook, transcripciones de entrevistas, etc. es acertada, ya que ayuda a dar agilidad a la narración y aporta complejidad a la historia, al reflejar de primera mano diferentes puntos de vista de los hechos. Estos recursos narrativos ayudan a Hunter a introducir en la historia uno de los temas principales de la novela, que es la lacra de los juicios paralelos y las campañas de odio en redes sociales cuando ocurre un suceso mediático. En muchas ocasiones, y en España tenemos casos flagrantes de los que avergonzarnos (¿os suena el caso Wanninkhof?), la mala praxis de los medios de comunicación y la irresponsabilidad de la gente lleva a buscar culpables y condenarlos de forma pública antes de que la Justicia se pronuncie. Esta novela explora con éxito esta lacra y nos hace reflexionar al respecto. |
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