Al ser el primer volumen de un trilogía es prácticamente introductorio en su totalidad. Hasta justo la página 300 no pasa sumamente relevante y luego, hasta (sin exagerar mucho) las diez últimas páginas, tampoco. El mundo o, más bien sus habitantes, me recordaron a Alicia en el País de las Maravillas. Variopintos y creados desde una loca imaginación que parece más infantil que otra cosa. Aun así, la autora ha hecho un mundo precioso. Bastante pesado y monótono, pero con un final que me ha dejado con muchas ganas de más, aunque no sé si seguiré la saga. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |