El verano de los juguetes muertos

No hace mucho tiempo ya leí otro libro de Toni Hill y quedé bastante sorprendida del registro que me aportaba este nuevo autor para mí.

Un día paseando por mi ciudad vi este libro, como no, en una tienda de segunda mano y me hice con él.

¿Cuántas vidas puede tener un libro? ¿A cuanta gente puede hacer viajar un solo libro? No sé, pero yo agradezco a la persona que lo dejó allí a cambio de céntimos porque no te dan más, por esta obra de arte que a mí me ha fascinado.

El verano de los juguetes rotos como bien dice el título transcurre en un verano. Lo que les ocurre a unos amigos en un verano. Pero es imposible no mirar atrás para ver lo que somos y hasta donde hemos llegado. Como dicen somos el resultado de nuestras decisiones.

Marc, Gina y Aleix (nombre que me encanta) son tres amigos inseparables, pasarán los años, pasarán tiempo alejados por estudios, pero siempre cuando pueden están juntos.

El inicio del libro es el suicidio de Marc ¿suicidio? ¿eso he dicho yo? Bueno pues parece que sí. Que todo apunta a que Marc se ha suicidado.

Es ahí cuando un inspector investigado por una presunta agresión y apartado de momento de los casos, es a quien le asignan el caso de que eche un vistazo por encima del suicidio y cierre definitivamente el caso para que la familia descanse.

La familia es una familia adinerada y bien situada en Barcelona, lugar donde se ambienta la novela, por eso quieren dejar el caso bien cerrado.

Pero lo que parecía un caso casi cerrado, Héctor le da la vuelta de una manera brutal. Manteniéndonos en vilo durante la novela e introduciendo nuevos elementos como las drogas, la pedofilia, la iglesia, los celos, el hacer el bien, venganzas, si es que al final se complica, pero bien el caso e implica a bastantes personas.

Y ya no os digo cuando aparece un segundo cadáver ¿de quién? Uy ya queréis saber demasiado.

Lo que me ha gustado de esta novela es que te va sorprendiendo continuamente de forma magistral enredando lo que al principio no era más que un simple suicidio.

El autor ha sabido ir y venir en el tiempo, mezclar ambos y sobre todo dejar testimonio de alguna cosilla en forma de diario, cosa que también me encanta en las novelas. Cuando pasas de la tercera persona a la primera y puedes leer lo que esa persona escribía en ese momento, sus pensamientos, sus palabras…

Mi edición es la de bolsillo, pero tiene una portada preciosa en relieve, vamos que han cuidado hasta la edición del libro en bolsillo. Es una portada que resulta muy atractiva para los amantes del género.

Seguro que repito con el autor, ahora a ver si hay suerte y encuentro un regalazo como éste.
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