Cari Mora

Han pasado muchos años desde que leímos la saga de Hannibal Lecter. Yo al menos cuando leo el nombre de Thomas Harris pienso en esos libros. Con Cari Mora tuve que mentalizarme de que era una novela que nada tendría que ver con su famoso personaje. Puedo deciros que he leído un muy buen libro lleno de parches reconocidos de ese autor. Está ahí, lo sientes y agradeces su regreso.
Un thriller policíaco lleno de suspense ambientado en Miami. Fue tanto el trabajo narrativo detallado de dicho lugar que da la sensación que Thomas le hace un homenaje en esta novela. Paginas completas dedicadas a que conozcamos un Miami más allá de esa ciudad del vicio. Allí llego el mal, la avaricia, brazos cuyas marcas recuerdan quién fuiste.

Cari Mora mujer colombiana inmigrante es el ama de llaves de una mansión en la costa de Miami. Su antiguo dueño fue el capo de la droga Pablo Escobar, asesino y supermillonario muerto en su día a manos de la policía sobre el tejado de una vivienda en Colombia. Ahora se usa para rodajes de películas con una macabra decoración. Bajo ella se ocultan veinticinco millones de dólares en oro dentro de una caja trampa. Quien logré abrirla volará por los aires junto al oro. ¿Divertido verdad? Nuestro autor puso en marcha su imaginación junto a sus habilidades llevándonos a la intriga de ver cómo se logra abrir sin morir en el intento. Todos querrán llegar al botín y la sirvienta estorba. Lo que no todos saben que ella es una misteriosa ex combatiente del FARC. Cari una enfermera de aves aparte de cuidar de la casa. Thomas con este detalle camufla su verdadera personalidad.

Estamos ante un maestro de las palabras trabajando una prosa nítida, transparente en esa atmósfera tensa reconocible tan personal. Mueve con rapidez casi cinematográfica una novela más policial que otra cosa donde la acción y buenos diálogos darán forma a sus dos personajes principales. Cari Mora, mujer fuerte, valiente con una personalidad arrolladora y Hans-Peter Schneider. Ambos bien definidos tendremos en el alemán a un sádico psicópata que estudió medicina y vende órganos, nada que ver con Hannibal ni por casualidad, aun así, tiene sus buenos momentos. También moverán la historia varios secundarios tan provocadores como repulsivos todos ellos del crimen colombiano. Solo hay una persona que sabe cómo abrir esa caja sin que explote, pero entendió que eso tiene un precio más allá del dinero. El autor va creando tramas hasta que las entrelaza en algo parecido a un éxtasis manteniendo la conexión con el lector con imágenes fuertes. Dejó una comprensión del ritmo excelente obligándote a seguir leyendo para saber quién será el próximo en morir. Esto va de muertes, no tengáis ninguna duda. Yo aquí añore torturas, para ser de los asesinos más sangrientos, si vale, hay mucha sangre y muertos, pero le faltó más sufrimiento, más gritos, más suplicas.

Hay momentos que no sabes si reír o estar aterrorizado con esta novela. Muchas escenas se mezclan entre lo humorístico y lo horrible. A través de flashbacks vemos los orígenes de Cari en las FARC. Mientras que en general los caracteres son unidimensionales, estos capítulos alcanzan mucha profundidad en pocas palabras. Estoy por decir que es lo mejor de la novela, lo que más se acerca a la realidad.

Una novela cien por cien latina, en nombres y acciones con mucho lenguaje nativo de Sudamérica, señalándonos la difícil situación de los inmigrantes ilegales en los USA. Humor negro, ladrones que se traicionan a sí mismos, armas montadas y cargadas en cuarenta y cinco segundos. Saltos entre Miami y Colombia, sangre, cabezas cortadas, recuerdos del FARC, sus guerrillas, sus escuelas adoctrinadas, en verdad hizo un escrito increíble de ese mundo. Porque el autor no solo los creo se metió en sus mentes, aprendió sus medios, sus técnicas. Todos pertenecen al inframundo criminal, leeremos realidades que están ahí fuera, no invento nada, la realidad es incluso peor.
Un final un poco precipitado, aun así, es una buena novela que entretiene de un autor americano que intento ponerse en la piel colombiana más sanguinaria.

Sí, lo recomiendo.