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Con este libro termina la trilogía A todos los chicos de los que me enamoré, y creo que es una perfecta forma de terminarla. En esta ocasión nos encontramos con una Lara Jean mucho más madura, a punto de terminar el colegio y pendiente de las universidades que la aceptan, pero también prestando atención a las alternativas universitarias de Peter. Hay un evento triste y hay un reencuentro con el, según mi opinión personal, uno de los mejores personajes masculinos, por supuesto que hablo de John Ambrose el cual me conquistó en el libro anterior y tengo que reconocer que no logró decepcionarme en todo este tiempo. Peter, ¿que decir de Peter? Un personaje típico, el chico popular, deportista que termina enamorándose de la chica a la que pocos registraban, sin embargo, es imposible pensar mal de él, me encanta el personaje, porque termina siendo humano, no perfecto, se equivoca, y valoro un montón la humanidad que se le otorga. Lara Jean es pura ternura, y en este libro termina de acomodar su relacion con sus hermanas y con su familia en general, siempre con esa dulzura y paciencia que la caracteriza, pero tambien la vemos enfrentar las decisiones de una manera muy adulta, lo que hace que me sienta muy orgullosa de ella. Una hermosa trilogía que volvería a leer mil veces. |
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