El Relato Del Monstruo

Durante toda su vida ha observado al mundo darle el paso a su hermana como el Mar Rojo, mientras ella corre detrás, esperando no ahogarse.

En antiguos tiempos, el lado izquierdo era considerado el lado siniestro o malo. Ser zurdo era un indicio de que se tenía una deficiencia moral. Los profesores te pegaban con una regla si te pillaban escribiendo con la mano izquierda. Así que me parece adecuado que el corazón, el símbolo del amor, el órgano que supuestamente mueve a tomar las decisiones más importantes de nuestras vidas, lata en el lado izquierdo del cuerpo.

Vivir con una familia herida por un dolor que no recuerdas es como estar sentado detrás de una persona demasiado alta en un cine. Las personas a tu alrededor ríen, lloran y reaccionan a algo, pero tú no tienes ni idea de lo que es.

Margaret, una buena chica, aún virgen, se imaginaba que el amor verdadero debía de ser un deporte de contacto, intenso y peligroso, algo que sucedía en las vías del ferrocarril o sobre el lecho de los bosques, dos cuerpos que intentaban expresarse pureza espiritual.

Noah, no hay tal cosa como un final feliz. Solo hay buenos sitios en los que parar.

La vida convierte a todos en monstruos, pero siempre es posible volver.