El Relato Del Monstruo

Seguimos la historia de la familia Turner durante varios años narrada por Noah, el hijo menor. Desde finales de los años 60 conocemos a los padres, Margaret y Harry, su historia de amor, el nacimiento de sus dos hijas, Sydney y Eunice, cómo se arruinan... Y nos va mostrando cómo toda la familia tiene experiencias con monstruos. Pero Noah elige dejarlos entrar... así se hará amigo de un bondadoso monstruo peludo de ojos naranjas que lo visita a menudo y que solo él puede ver. Una extraña criatura merodea por la casa y la familia quiere proteger al pequeño Noah.

Esta es la premisa de la que parte el autor para mostrarnos las complicadas relaciones en una familia que no sabe comunicarse y que juntos deben enfrentarse a un destino trágico.


No sabría muy bien cómo definir esta lectura. Es un terror light, con toques de trhiller y misterio, incluso con algo de ciencia ficción... Con una atmósfera muy especial que me recordó a Tim Burton y a Stephen King. Hay muchos guiños a obras literarias y cinematográficas, y por supuesto muchas referencias a Lovecraft, que está presente a lo largo de toda la novela. (Aclaro que no es necesario haber leído al autor para disfrutar de la novela 😉).


Hay dos temas que destacan en esta novela y que están relacionados: la pluma del autor y los personajes. La mezcla de la atmósfera que crea el autor y de la familia Turner es excelente.

Por un lado, la narración original, detallada y con una ambientación excelente que consiguió atraparme entre sus páginas. Por otro, los fuertes vínculos que sentí con los personajes. Son retorcidos y oscuros pero están psicológicamente tan bien construidos que el autor consigue transmitirte ese lado humano y tan real que hace que empatices, incluso sientas un cariño especial por cada personaje. Cuando llegas al final te conmueve, es una mezcla de esperanza y nostalgia...


El autor aborda temas como enfermedad mental, duelo, soledad, depresión, homosexualidad. Es la historia de los monstruos, figurativos y muy reales tal y como dice la sinopsis, que persiguen durante años a la famila Turner.

Una novela que los amantes de Burton, King y Lovecraft estoy segura que disfrutarán. Y si sois fans de Stranger Things también os gustará 😉

Hola, hace ya mucho que no traigo alguna reseña de terror, y bueno eso tenía que cambiar. Antes era de los géneros que más me gustaban, pero últimamente y de cara a algunos años lo tengo bastante abandonado. Así que no me pude resistir a la propuesta de lectura para este verano de Umbriel.



Es la primera vez que leo al autor, bueno es normal estamos ante su primer libro publicado, y la verdad es que ha sido una experiencia buena, de tiempo que llevo lejos del género me pensaba que me costaría más adentrarme en este mundo. La narrativa del autor me ha gustado, nos sumerge en un principio poco a poco en la vida de esta familia con tan mala suerte en la vida. Noah es un hombre que nos relata la vida de su familia desde que sus padres se conocieron hasta su vida adulta. Por todo ello pasamos de forma que sin darme cuenta ya estaba metida en la historia sin poder soltarla. Voy a confesar que el principio es algo introductorio, pero necesario, tenemos que ver de qué manera esta familia llega al estado en la que se encuentra con un Noah ya adulto.



El autor nos narra sin grandes descripciones pesadas, sin grandes parones y por supuesto dando en todo momento una ambientación algo asfixiante de una familia en decadencia. No solo tendremos a Noah como principal protagonista, después de cada parte tendremos unas cartas escritas por algún miembro de la familia, aunque tendremos más de su hermana, la que ya desde el principio nos dice que se suicida, lo que me hizo estar bien pendiente de este personaje secundario. Los monstruos que pueblan las pesadillas de su madre desde el comienzo del libro es un gran aliciente para hacernos pensar si es algo producto de su imaginación y decadencia del cerebro por alguna enfermedad, o estamos ante un libro que nos muestra un mundo sobrenatural, y el monstruo es algo real y tangible. Esta sensación me acompañó en gran parte de la novela, ya que la familia sufre de serios problemas como es la depresión y casos de esquizofrenia, ni un solo miembro se salva de tener mala suerte en la vida. Además Noah es un chico especial, desde niño le visita un monstruo a su ventana, un monstruo que su familia no puede ver.



La ambientación me ha gustado en cierta medida, me esperaba algo más opresivo y oscuro, aunque no me ha desagradado del todo, tengo que decir que la trama en algunas partes fluye muy bien y acompaña bien a una ambientación desde los años 60 a los 90 en un pequeño pueblo de América del norte. Donde fluye mayormente son en las cartas al final de cada parte, en la que muchas veces pasan años y se narra de pasada algunos acontecimientos, algo que me ha gustado, porque sino el libro hubiera sido lento de leer y denso, y no lo es para nada, ya que en estos acontecimientos pasan años de la historia familiar. Así que no hay mucho que reprochar a la lectura, lo único que si a veces se me ha atascado un poco la historia en la parte de Noah, pero solo un poco, nada a tener en cuenta, ya que son partes algo más necesarias para meternos más en la historia de Noah y su monstruo. Tendremos muchas referencias a los libros de Lovecraft, para los fans lo disfrutaréis mucho, aunque también a otros autores muy conocidos de terror, ya que Noah y su padre son grandes lectores de este género, tanto en comic como en libros actuales y antiguos.



Los personajes están muy bien, creo a mi parecer que no es fácil meterte en la piel de un chico tan especial como es Noah, no es sociable, se escuda en su monstruo en todo momento de su vida, y en ocasiones me ha dado la sensación de que el autor nos mostraba un personaje con cierto grado de Asperger, lo que lo vuelve un tanto complejo en algunos aspectos, sobre todo ante acontecimientos que ocurren a los miembros de su familia y su forma de ver la depresión. El resto de personajes secundarios tienen importancia en mayor o menor medida, según la parte de la historia en la que nos encontremos, así que el autor les ha sabido dar la parte de protagonismo justo para la historia. Quiero comentar que tenemos también representación del colectivo, me gusta ver esto, ya que el autor nos lo representa tal y como se veía en los años 80 y 90 con tanta lucha aún por delante.



En general me ha gustado, me ha hecho ver que todavía puedo disfrutar de este género que tengo tan abandonado. La historia te sumerge en un mundo real en el que hay monstruos, los cuales en todo momento el autor juega con nosotros para hacernos pensar si son tangibles o producto de una mente enferma. La narrativa alterna entre la historia de Noah y su familia y unas cartas de sus familiares que en algunas ocasiones nos harán reflexionar y en otras nos adelantará años en la trama. Sin duda si el autor se decide y escribe otro libro le daré una oportunidad, y al género también.
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Antes de nada comentaros que, en mi opinión, este no es un libro de terror. al menos no un libro de miedo al uso, si que es cierto que la atmósfera se caracteriza por la ausencia de luz pero, quitando algunas escenas puntuales que explicaré en la reseña, no lo catalogo como una novela de terror.

Días después de haberla terminado, todavía sigo dándole vueltas a la historia. Este libro es, sin duda, uno de los más peculiares que he leído. Me he pasado toda la lectura sin saber que estaba pasando pero TOTALMENTE enganchada.


Conocemos a la familia Turner; madre, padre, dos hijas y un hijo. Será Noah, el pequeño, quien nos cuente en retrospectiva todo lo sucedido a esta familia aficionada a las historias de terror.

Desde sus orígenes, cómo empezaron a cimentar esta familia hasta lo que sería la actualidad de la misma. La construcción de una casa del terror, la evolución de los miembros de la familia y un montón de misterios donde parece que haya monstruos, reales y figurados, implicados.

Como os comentaba, no lo considero un libro de miedo, aunque si tiene una atmósfera y unos personajes oscuros, además de algunos puntos que despiertan un terror distinto, más basado en la gravedad de lo que está pasando que en el miedo tradicional. Porque si tuviera que catalogar este libro de algún modo sería como un drama familiar con una ambientación oscura.

La lectura es muy ágil y fluida, lo que es algo muy positivo ya que consigue resultar adictiva aunque no entiendas que está pasando. Yo he estado perdida, sin saber de que iba la cosa, hasta llegar al final. Un final que sorprende cuando lo lees y que te deja boquiabierto cuando encajas todas las piezas de la historia.

El libro está divido en siete partes que a su vez están divididas en diversos capítulos, algunos más cortos y otros más largos. al final de cada parte hay un capítulo que, a modo de guión, nos cuentan más sobre los pensamientos y emociones de cada uno de los personajes.

Además de la presencia de esa atmósfera oscura que parece rodear a la familia Turner, otra parte esencial de este libro son los personajes. Tanto Harry y Margaret, los padres, como Sidney y Eunice, las hijas mayores, viven con monstruos. Y por supuesto Noah, el hijo pequeño nacido en esta familia que sabes que está dañada pero no entiendes porque, también. Algunos monstruos serán reales y tangibles, otros no se pueden visualizar con los ojos, pero no por eso son menos reales.

También destacar que tiene bastantes referencias a Lovecraft. Encontraremos fragmentos de su obra y, en cierto modo, puede haber una relación. En mi caso y sin haber leído nada de Lovecraft, no he tenido ningún problema para ubicar y entender estos comentarios en la historia de "El relato del monstruo", eso si, hasta el final.

Recomendado si queréis leer algo súper diferente y adictivo, donde nada está claro hasta el final y con unos personajes complejos y algo oscuros.

Hoy os traigo la reseña de un libro al que le tenía unas ganas tremendas. Se trata de El relato del monstruo, escrito por Shaun Hamill y publicado de la mano de Umbriel. En cuanto vi que era de terror me lancé a pedirlo, no me puedo perder nada de este género. Y si encima me dicen que es una mezcla de Lovecraft y King pues a mi ya me tienen ganada. ¿Habrá cumplido con mis expectativas? Sigue leyendo.

Esta es la historia de una familia, los Turner, quienes viven cerca de la muerte, por así decirlo, ya que al lado de su casa hay una especie de atracción, una casa embrujada, construida por ellos mismos. Se dedican a coser los disfraces y a montar toda la casa, idea del padre Harry, quien es un fanático del terror. al final, la casa deja de dar beneficios y queda abandonada pero es retomada tiempo después por Noah, el hijo pequeño de la familia, por su madre y hermanas, ya que están pasando por un delicado momento financiero. Un día, Noah oye unos arañazos en la ventana y descubre que una extraña criatura lo visita por las noches.

Tras leerlo, considero que no estamos ante un libro de terror. Para mi ha sido una especie de drama familiar, con bastantes momentos inquietantes y toques de horror sobrenatural pero no un terror al uso. No hay fantasmas ni sustos de muerte ni nada de eso. Lo que si hay es una ambientación muy Lovecraftiana y una historia dura de una familia a la que parece que le persiguen las desgracias. El libro empieza contando, de la mano de Noah, como se formó la familia Turner, cuando Margaret y Harry se conocieron y enamoraron. Ya desde entonces empezaron a ocurrir algunos sucesos extraños que parece que siguen a la familia hasta la actualidad. Tanto Eunice como Noah han visto una especie de criatura con los ojos naranjas tras la ventana pero nadie les cree. Eunice lo deja pasar pero Noah no.

Hay muchas referencias a Lovecraft y esto es algo que me ha encantado ya que soy una gran fan del escritor de Providence, y ha sido un placer leer tantos guiños a él y a sus obras. Es una historia grotesca, algo bizarra y bastante perturbadora. Lo he terminado y me ha dejado muy buenas sensaciones. Bien es cierto que me esperaba una novela más terrorífica pero lo que me he encontrado no ha sido malo para nada, ha conseguido sorprenderme y mantenerme enganchada hasta el final, solo quería leer y leer. Hay algunas partes que se me han hecho más pesadas que otras y, en ese sentido, el ritmo flojea un poco, pero considero que es una lectura amena y ágil y no llega a aburrir.

Los personajes están bastante correctos aunque no me han caído demasiado bien, pero he empatizado con ellos y comprendo sus decisiones. En cuanto al final...bastante bueno, a mi me ha convencido. Me hubiese gustado que el autor explicase en más profundidad el misterio pero no ha estado mal.

En definitiva, El relato del monstruo es la primera novela del autor y se ha desenvuelto bastante bien en un género tan crítico como es el terror. Me esperaba más pero lo que he leído me ha gustado también y lo he disfrutado.
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Esta historia gira en torno a una familia y a los monstruos que los persiguen. A la familia Turner el horror los persiguen desde hace décadas. La obsesión de uno de los miembros de la familia por el terror, hará que quiera construir una mansión embrujadas a la que llaman "El laberinto del terror". La economía de la familia hará que tengan que vivir allí e intentando proteger al pequeño Noah del monstruo, sin que ellos sepan que Noah ve una criatura todas las noches. Me encanta como empieza el libro, y como avanzando la historia y el negocio familiar se convierte en la casa embrujada.
Me gusta demasiado como se presenta el miedo, el dolor, la pérdida, etc y su forma de actuar cada miembro de la familia. Aprendes sobre la complejidad de la familia en solitario pero también en unidad. Es una historia difícil de explicar, en la que no es para todo el mundo. Ya que se habla del suicidio, la depresión, el abuso, etc. El libro contado desde la perspectiva de Noah, es una puntazo.
Es un libro triste, con personajes obviamente tristes y oscuros, con su propio pasado. Para mí es un libro que merece ser leído (pero repito que no es para todos), ya que dentro de nosotros, siempre hay monstruos, no todos es felicidad.

La familia Turner siempre ha vivido con una sombra cerniéndose sobre ellos, la de un monstruo que aparece en sus pesadillas... Y cuando están despiertos.

Esta historia, con tintes de Lovecraft y Stephen King, nos lleva de la mano por el relato de Noah Turner, el hijo menor de la familia, el cual se hace amigo de un extraño monstruo de ojos naranjas que aterroriza en sueños a su madre y a su hermana Eunice. de la mano de esta amistad irá creciendo y descubriendo los horrores que oculta el mundo y cómo afectan a su familia.

Se trata de una narración inquietante, que engancha porque necesitas saber qué es ese monstruo, por qué se acerca a Noah y qué será de él y su familia.

Me encantan los toques lovecraftianos que incluye la historia, que la convierten en algo entre onírico y perturbador que he disfrutado mucho. Pero también he disfrutado de algunos aspectos que me han recordado a Stephen King, especialmente en la construcción de los personajes y las relaciones entre ellos.

Pero lo mejor de este libro es la forma en la que el autor combina los elementos de terror con el drama que vive la familia, uno que pertenece a una vida normal y corriente; los problemas que derivan de crecer, descubrir el mundo y saber que la vida no siempre es justa. Estas escenas son de un realismo que estremece y me ha encantado ver cómo se entremezclan con los elementos monstruosos o fantasmagóricos del terror.

En general, una historia que engancha y estremece, que nos muestra elementos de terror ficticios y otros muy reales, pertenecientes a la vida diaria. Un imprescindible si os gusta el terror y una muy buena opción si queréis adentraros en el mundo lovecraftiano y comprobar si os gusta ese género.

¿De qué trata este libro? Nuestro protagonista se llama Noah Turner, desde el primer momento nos deja claro que su familia tiene que ver con monstruos y que hay algo retorcido y perturbador acechándolos. En los primeros capítulos conocemos el pasado de la familia Turner, somos testigos de cómo se conocierón los padres de Noah, Margaret y Harry, de su enamoramiento, del nacimiento de sus dos hijas mayores a Noah, Sydney y Eunice, y del nacimiento del propio Noah, además de la enfermedad de Harry y su muerte. Todo esto nos da un trasfondo para comprender el nacimiento de una misteriosa casa del terror que será el eje de esta particular novela. Dentro de todo este universo de acontecimiento, en el que tenemos muchísimas referencias al cine clásico de horror y al universo de Lovecraft, se encuentra una extraña entidad que parece acechar a la familia, un ser que descubriremos poco a poco, y que estará muy relacionado a Noah, que dará una sombra terrible y perturbadora sobre esta peculiar familia. ¿Quién es este extraño ente?

No sé muy bien que opinar de este libro, ya que hay cosas que me gustan muchísimo y otras que, definitivamente, me hicieron exclamar un “¿Qué rayos estoy leyendo?” y que no entendí, en ningún momento, el porqué el autor decidió ponerlas ahí. Pero vamos por partes, comencemos por los aspectos positivos de la novela, en primer lugar tenemos una pluma muy ágil, una narración fluida que recuerda a grandes como Stephen King, el inicio es este tipo de novela, que personalmente disfruto mucho pero que no gusta a todos los lectores, en el que conocemos los inicios de la historia desde sus tiempos primigenios, sé que para muchos lectores es una pérdida de tiempo leer tanto trasfondo de personajes y de sucesos, pero creo que en este tipo de libros es algo que le da más “jugo” a la historia y nos ayuda a ir catando, poco a poco, la pluma del autor y la forma en que nos presenta los acontecimientos. El verdadero terror, para mí y opinión puramente personal, debe ser lento, calmado, ir aumentando la tensión poco a poco, bajarla, volver a subirla, jugar con el lector, dar giros de trama. Esto hace que la experiencia de leer este género sea más rica, no es lo mismo iniciar con una historia donde Noah ya es un adulto y comienza a descubrir más de este ser que ir conociendo a Noah, encariñándonos, conocer el trasfondo de su familia, empatizar con su madre, con sus hermanas, conocer sus lados oscuros, todo esto hace que los personajes sean reales, que podamos empatizar con ellos y con sus penurias y hace que la historia se puede llegar a sentir “propia”, al ser más empáticos con los personajes sentimos “más” las situaciones de tensión que se dan. Si la historia fuera sólo el monstruo que aparece, no sería muy larga y, probablemente no daría para más allá que un relatico. En sí, El Relato del Monstruo es una novela de personas normales con problemas normales que vive situaciones extraordinarias, tenemos a un ser monstruoso que parece ser amigable, vemos el crecimiento de Noah y su maduración como adulto, lo vemos crecer de un niño curioso que ve como algo “peculiar” a su amigo secreto, hasta un joven adulto que tiene sensaciones propias de su edad y que transforma la novela en algo, un poco, surrealista y hasta erótico.

Siempre he pensado que el terror extraordinario proviene de situaciones ordinarias, porque es ahí donde sabemos que podríamos ser nosotros los siguientes. Es difícil ponerse en los zapatos de un astronauta, a no ser que seamos uno LOL, y encontrar un ser cósmico y terrible en el espacio, porque nunca pasaremos algo así y, posiblemente, nuestra mente humana no pueda concebir el horror cósmico real. Pero es fácil ponernos en los zapatos de un niño que ha perdido a su padre, con una madre fría que tiene conflictos constantes con su hermana mayor y que no comprende a su otra hermana mayor con tendencias suicidas, ¿Qué familia, en mayor o menor medida, no tiene problemas? Pues eso es cotidiano, y agregarle a esto un toque paranormal es una fórmula más o menos segura para crear horror (Stephen King lleva años haciéndolo y ya vemos lo rico que es el tipo), el problema que yo tengo con El Relato del Monstruo es que el autor no supo como encaminar su historia a algo que cuajara totalmente, es un intento de “quiero pero no puedo”, creo que hacer un “monstruo amigable” no funciona y menos cuando no vemos que realmente haga daño a alguien o sea terrible, el añadir una relación extrañamente sensual y romántica solo hace que todo el asunto sea aún más extraño. Y esa es la forma de describir a este libro, no es terrorífico, perturbador o inquietante, es extraño, pero en un sentido más bien bizarro, y no tiene pies ni cabeza, el autor intento inspirarse en la literatura y obra de Lovecraft pero se queda muy corto a la hora de describir sus propios horrores cósmicos…¿Licántropos? ¿Dioses Cósmicos? ¿Pubertad? No sé a qué hay que tenerle miedo en este libro, pero definitivamente es una novela sumamente bizarra, surrealista y extraña que comienza muy muy bien pero que termina de una forma tan confusa y mediocre que simplemente no funciona. En resumen, El Relato del Monstruo no es el peor libro de la historia, pero si es una novela sumamente ambiciosa que solo termina en un revoltijo y en una confusión total, la historia de una familia disfuncional que fue acechada por un extraño monstruo que termino en una historia medio erótica con el menor de la familia. No tengo muy claro el camino que el autor quería seguir y creo que su pluma tiene mucho talento por explotar pero esta historia, definitivamente, no funciona y es como un pastel que se ve muy apetitoso pero que en su interior está crudo. Una decepción...
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Los monstruos (figurativos y muy reales) siguen los pasos de la familia Turner. Es entonces cuando la familia intenta proteger al pequeño Noah de los horrores de la casa, pero no son conscientes de que el pequeño siempre recibe una visita muy especial: una criatura peluda de brillantes ojos color naranja. La misma criatura que visita a su madre y a su hermana en esas pesadillas sin fin.
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Me impresionó mucho todo lo que encontré en esta novela, ya que hace poco me enteré de que fue el primer trabajo del autor. Está muy bien escrito, de manera atrapante y me atrevería a decir que uno de los mejores libros que he leído este año en cuanto a ambientación. No sabía bien donde me estaba metiendo cuando comencé el libro y para nada fue lo que me esperaba.
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Que ojo, no tiene porqué ser algo malo, pero sí que me esperaba una historia de terror más explosiva y aterradora y me ha resultado más como un turbulento drama familiar con tonos de terror paranormales. El autor ha jugado muy bien con el lector, ya que en algunos momentos yo ya no sabía lo que estaba leyendo, no comprendía si se trataban de monstruos reales o productos de una mente enferma.
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No mentiré, es un libro duro. Tiene muchos momentos inquietantes, desgarradores y no aptos para todo el mundo. Un drama familiar que no da respiro a sus protagonistas, a los que parece que les ha caído la tragedia encima. Hay muchas referencias a Lovecraft y demás autores del género, cosa que me ha hecho mucha ilusión encontrar.
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El final me gustó, es un hecho. Aunque considero que el autor debería haberse explayado un poco más a la hora de desvelar el misterio, porque queda algo bastante confuso. Pero aún así, deja una sensación de satisfacción. Es un buen broche para cerrar esta historia tan original. Lo único que no me llegó a convencer demasiado es que en cierto tramo del libro se forma una insana y extraña historia de amor-erótica que no llegué a comprender bien. Los que lo hayáis leído me entenderéis. de todo lo que me esperaba, no era eso.
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¿Lo recomiendo? Muchísimo. Creo que hay que darle una oportunidad a la novela, es muy misteriosa, con unos momentos muy inquietantes y de sobresaliente. Una ambientación oscura, donde los monstruos y las sombras parecen estar al acecho. ¿Está sucediendo realmente o está todo en tu cabeza?

Para ser de terror, no sentí miedo, más bien confusión durante la segunda mitad del libro.

Tiene un buen comienzo, todo gira a que todo es un problema mental, esquizofrenia o algo. Pero no, a medida que avanza la trama, se da a entender que nada de eso es posible, que las cosas extrañas si existen. Y eso está bien, al final es ficción. Pero todo comienza a desarrollarse de manera absurda y el terror ya no daba miedo.

El libro se divide en 7 partes, en las primeras cinco iremos viajando en el tiempo. Primero conocemos a Harry y a Margaret, los padres de Noah, luego conocemos su familia, y la llegada de Noah, un Niño no planeado a una familia que estaba a punto de disolverse. Luego pasamos a otra época donde Noah es un niño y vemos que ha sucedido en los últimos años. Luego un Noah Adolescente, luego uno joven (22 años aprox) y luego un Noah adulto. En esta última parte, es donde la historia planea llegar a su final. Y tenemos las últimas dos partes, que se supone es el presente o lo más cercano al presente.

Esas dos ultimas partes son confusas, no entendí nada de lo que estaba ocurriendo, el cambio de narrador entre un párrafo y otro hacía que perdiera el hilo de la lectura y no supiera que estaba leyendo o en que época estaba o que era lo que sucedía.

El salto en el tiempo entre cada parte, al inicio me gustaba, era divertido y estaba lleno de intriga. Pues al final de cada parte, algo ocurre. Lo malo, es que al iniciar la otra parte ese final es como si no existiera, esta presente, si, pero no se desarrolla y muchas cosas van quedando en el aire. Hasta que llegamos a la última parte, donde el autor nos quiere meter todas las respuestas, y no me gustó porque hace que el final se sienta pesado de leer y hasta confuso.

A mediados de la historia, ya no sentía que fuera de terror. El que metieran a un monstruo, no necesariamente lo hace ya de terror. Sentía que era más de fantasía, tenemos a estos individuos que cambias de forma, en un mundo ajeno al nuestro, donde se desarrolla otra historia. Y así lo termine leyendo, como una fantasía.

El final no me gusto, la historia en general tampoco. le doy 3 estrellas porque la primera mitad del libro fue adictiva y estaba muy interesante y llena de mucha intriga. Pero la segunda mitad se me hizo pesada de leer, no ocurría realmente nada y todo era repetitivo y aburrido.

4.3 estrellas

No saben las ganas tremendas que le tenía a este libro , me encanta el terror en todas sus formas y en todos los formatos tanto en películas o libros y aunque no soy una persona que se asusta tan fácilmente lo disfruto bastante, me gusta la tensión y el misterio que encierra este tipo de historias.

No sé si considerarlo como un libro de terror siento que es una historia llevada mas a lo sobrenatural y a lo psicológico. Podríamos decir que es un libro para principiantes en el género o para quienes les dé miedo adentrarse en el terror.

Me gustó la ambientación Lovecraftiana que tiene , hay varios guiños a él y a sus obras esto se debe a qué unos de los personajes/autor ama a Lovecraft así que si eres fan del escritor de Providence podrás identificarlas y si no, no pasa nada de igual manera se disfruta.

Algo que me gustó mucho fue el desarrollo de personajes son bastante complejos y oscuros llenando el libro de momentos bastante intensos e inquietantes.

Hay una escena en particular que me fue muy difícil de procesar y después llega el plot twist más raro de la historia de los plot twist. Les juro que no sé me pasó por la cabeza que el autor abordará de esa manera la relación de estos dos personajes.

Algo que me gustaría destacar de mi experiencia con este libro es que sentía que no me estaba enterando de nada me sentí confundida por momentos además juntemos las varías teorías que pasaron por mi cabeza, muchas de ellas se fueron derrumbando como piezas de domino. Pero solo hasta el final que en mi opinión me ha gustado y me ha convencido es cuando todo empieza a cobrar sentido.

El único pero que le agregaría a esta reseña es que hubo algunas partes que se me hicieron algo pesadas, el ritmo flojea un poco pero no tanto para decir 'no quiero leer más" créanme no se van a aburrir.

Para ser el primer libro del autor creo que se ha desenvuelto muy bien, esperaba que fuera mas terrorífico pero no está mal.