Aunque algunos relatos me parecieron mas “livianos” que otros el libro me gustó y me dejó con ganas de leer todo el proyecto de escritura que comenzó Eduardo Halfon con este título y que finaliza con “Duelo”, libro que leí dos veces. “Postales” es uno de los cuentos que más me gustó, me recordó a Cartarescu y a Danilo Kis. al primero por esa nostalgia que trasmiten los gitanos y al segundo por el profundo desarraigo que sienten los nativos de la antigua Yugoslavia. Cada postal es una señal, una miguita de pan para encontrar el camino, aunque no se sepa muy bien cuál es ese camino. Esas señales se vuelven una obsesión en “La Pirueta”, un relato largo que me resultó tan confuso como apasionante, aunque no sepa explicar bien el porqué. de este libro hice una primera lectura sin entrar en los laberintos que nos propone el autor. Ahora, mientras escribo esto, escucho un concierto de Saban Bajramovic , el que vivió “errando solito por quién sabe dónde” y sé que , indefectiblemente, voy a caer en el laberinto “halfoniano” y en la relectura |