La mayor aventura siempre será el viaje a través de nuestros recuerdos, hasta reencontrarnos con nuestra esencia, hasta reconocer lo que fuimos, como pequeñas piezas, de lo que somos hoy. Esta obra es, precisamente, la travesía de Agustina Guerrero, zambulléndose en su memoria de la mano de la compañera (Lumen, 2022). A lomos de dos caballitos de mar -los responsables de atesorar cada momento en nuestro cerebro-, ambas rescatarán las etapas más felices de su existencia, junto a su abuela materna en Tandil, jugando con sus primos o recibiendo a su hijo. No hay luz sin oscuridad, y también la sombra de la pérdida, el abuso o la inseguridad formarán parte de este periplo que aúna felicidad, dolor y descubrimiento. Pura vida. Y para lograr una vida plena es necesario abrazarse. Dejarse conducir por nuestros abismos, enfrentándonos a nuestras inseguridades. Aceptar la humanidad que hay en la culpa o en la vergüenza. Y aprovechar el empujón recibido para devolver todo el amor que recibimos. Atrévete a emprender este viaje. Enlace: https://www.instagram.com/mi.. |