La felicidad es tímida. Solo se deja ver cuando la espías a través de una ventana.
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La felicidad es tímida. Solo se deja ver cuando la espías a través de una ventana.
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Te quiero Elisa. Quiero estar contigo, tan complicado y tan sencillo como eso. Tú eres mi vida. Ayer, hoy, siempre
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-¿Qué somos entonces? -Somos Elisa y Marcos ¿Te parece poco? |
Solo tú sabes lo que guarda tu corazón, pero si me rompieses el mío encontrarías que mis hijos y tú estáis ahí dentro
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Hay un lenguaje que todo el mundo entiende, y es el de los actos. A las personas se las conoce por sus actos, no por sus palabras.
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Ay, hijo, el pasado queda lejos, el futuro es un enigma, pero el presente es tuyo. Aprovéchalo.
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Quien te quiere, Elisa, nunca se aleja. Ni un mundo entero puede alejarlo. Solo tienes que cerrar los ojos para saber que no estás sola.
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El único tiempo válido es el que se disfruta
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Encajar o morir. El lema resume a la perfección el poderoso sentimiento de aislamiento que nos invade a la edad que debería ser la más feliz.
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En otro tiempo, en otra vida feliz, habríamos hablado. Ahora, en cambio, no tenía más remedio que calmar o mentir sin distinciones. Porque a los adultos se les miente. Por su bien
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¿Cuál es el órgano que trasplantan a Cora?