después de leer El espía de Dios esperaba algo más de este autor. La historia de los Balcanes y la mafia comienza de manera interesante pero al trasladarse a Estados Unidos se desdibuja y particularmente no me resulta tan creíble. Creo que las historias que se cruzan no son del todo compatibles hubiera preferido que cada una de ellas se desarrollara en libros separados
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