Cuarto libro que leo de Joël Dicker y cada vez me gusta más. Me encantan sus historias llenas de intriga y acción, manteniendo el suspense durante toda la lectura, con giros inesperados y unos desenlaces muy elaborados y difíciles de prever e intuir, al menos en mi caso. Joël Dicker, autor y protagonista a la vez, decide pasar unos días de vacaciones en un hotel de los Alpes después de una ruptura sentimental. Yendo a su habitación, le llama la atención la correlación de de los números de las habitaciones, falta la 622. Intrigado, pregunta la razón de dicha anomalía y le cuentan que en esa habitación se perpetró un asesinato que no se pudo resolver. Junto a su vecina de habitación, una joven aspirante a escritora, iniciará una investigación que le llevará a la resolución del enigma de la habitación 622. Una trama muy bien urdida y llena de acción y giros argumentales que te llevan de una sorpresa a otra y desmontan cada una de las teorías que puedas haber formulado con las pistas que te va dando la lectura. Una lectura muy adictiva que te hace pasar unos buenos ratos y de la que cuesta parar. Un libro quizá un poco largo para mi gusto pero que se me ha hecho muy ameno y entretenido. Muy recomendable si te gusta el género o quieres iniciarte en él. ¡Feliz lectura! |