El bestiario de Axlin

La primera parte del libro me sorprendió gratamente. Empezamos con Axlin, un personaje rebosante de curiosidad que, a pesar de sus orígenes, sabe mirar más allá y lanzarse a lo desconocido en busca de conocimiento, así tenga que enfrentarse a lo que más miedo le causa en este mundo: los monstruos. Me pareció un personaje entrañable que me gustaba seguir, además de los misterios que se nos van planteando con respecto a los monstruos de camino. Esa parte me pareció muy interesante y original.

A mitad de libro más o menos, se nos introduce otro personaje, Xein, y es ahí cuando el tono del libro cambia, alternando puntos de vista pero no de manera equitativa, de modo que hay unos cuantos capítulos seguidos sobre éste que, aunque en un principio apuntaban bien, se me hicieron repetitivos, y algo aburridos incluso. Siguen estando ahí esos misterios, al igual que la trama de Axlin, pero quedan relegados a un segundo plano. Aún así, hacia el final del libro me pareció que por fin cogía ritmo esa segunda trama, aunque me dejó con una sospecha sobre un tópico que esperaba no encontrarme esta vez... Espero equivocarme.

A pesar de lo dicho, el libro me ha gustado, y es increíblemente ágil de leer; sin embargo me ha parecido muy introductorio (algo común siendo una trilogía), algo desequilibrado en cuanto a las partes de los personajes, y que cae en algunos recursos (instalove, etc) de los que no soy muy amiga.
Aún así, es un libro muy entretenido, que he disfrutado bastante y que se lee con rapidez. ¡Tengo mucha curiosidad por ver si podremos ahondar en los misterios que rodean a los monstruos en el segundo libro!